sábado, 13 de diciembre de 2025

13 de diciembre de 2025. Sábado.
EL ADVIENTO DE MI VIDA

Vendiendo libros, silencios, para Cáritas. Navidad. Molina de Segura. Murcia.

-Amo la prudencia, como virtud y cualidad de espera, es el adviento de mi vida. La prudencia camina con cautela, con sensatez y buen juicio en el camino de la vida. No se precipita, la discreción es su modo de actuar. Después de sopesar lo que conviene hacer, da pasos firmes o se abstiene. Habla poco y en el momento oportuno. La prudencia piensa las palabras y, en cada momento, dice las que conviene, no habla por hablar. Dice el refrán que «callar y coger piedras es doble prudencia», es una autodefensa. La prudencia es cualidad que toca la sabiduría, pues en ella, a veces, va la vida o la reputación. Decía Antonio Machado, regeneracionista y con tristeza de sabio, decía: «En España de cada 10 cabezas, 9 embisten y 1 piensa». La prudencia me ha dado más momentos de felicidad, que el actuar rápido y sin pensar, o decir palabras sin sentido. Las muchas palabras absurdas, Diario, embadurnan la boca de pedantería, boca que acaba por oler a miseria.

viernes, 12 de diciembre de 2025

12 de diciembre de 2025. Viernes.
LA HORA DEL RELOJ DE LA VIDA

Puente que nos lleva al más allá. Murcia.

-Vienes y sigue saliendo el sol, festivo y sin cansancio. El sol: la luz que nos ayuda a caminar en la vida, y a celebrarla. El calendario mide el tiempo, y los humanos, con nuestros logros y derrotas, lo vivimos; en la eternidad, sin calendarios que la midan, vive Dios, adonde se dirigen nuestras vidas e ilusiones, como un imán divino que nos llamara. Dice el Eclesiastés, libro sagrado: «Todo tiene su tiempo, y todo lo que vive bajo el tiempo, tiene su hora». La hora del reloj de la vida, la que nos duerme en el tiempo, y nos despierta en el más allá, en el que se vive sin calendario y sin despertador, solo, Diario, con la visión y la claridad amorosa de Dios: el día nuevo y radiante que esperamos, y en el que seremos examinados del amor. 

jueves, 11 de diciembre de 2025

11 de diciembre de 2025. Jueves.
EL INFINITO HECHO VIDA

Pensando caminar sobre sus aguas. Torre de la Horadada. Alicante.

-En tres días, he visto el mar,  y en calma, dos veces. Pensar que puedo caminar sobre sus aguas, tranquilas y azules, sería como decir que he pisado el cielo y el agua a un tiempo. En el horizonte se unen cielo y mar, en una línea indefinida y líquida, admirable. Me cautiva el mar, es mi debilidad por su belleza y por su porte señorial y variable. Ante el mar, veo, sin humillarme, mi pequeñez, con mi grandeza; el mar no piensa, y yo pienso: vuelo en mis sueños. El mar vuela en sus olas, pero limitando la altura de este vuelo. Si dejas que el mar hable a tu alma, abrirás la puerta de la felicidad y de la paz. Apasionado y ebrio de felicidad, Julio Verne decía: «El mar te habla de una existencia prodigiosa y sobrenatural, es el infinito hecho vida». Y lo más prodigioso, Diario: en él, como maravilla, se vislumbra, se presiente a Dios, su Creador. 

miércoles, 10 de diciembre de 2025

10 de diciembre de 2025.Miércoles.
VIVIR EN UNA EPIFANÍA CONTINUA

¿Buscando la trascendencia? Autor: Suetonio

-Lo sagrado nos llama, nos cerca con una invitación a dejarnos seducir. La sociedad parece que se ha hartado de lo superficial y busca, en muchos casos angustiada, lo trascendente. Lo Trascendente, lo que perdura, lo que siempre queda dando luz y esperanza a las conciencias. Vivir en la trascendencia es vivir en una epifanía continua, en una fiesta del espíritu. Es hacer que el espíritu vaya siempre delante de la materia, abriendo caminos, logrando destellos de la belleza de Dios. Es, sin dejar la verdad de mundo, que nos sustenta y nos permite vivir, acercarse a la Verdad de Dios, en la que se halla las certezas libres y vivas de la realidad humana. Si desde la fe se da con Dios, se habrá hallado, Diario, la vida plena y la paz, lo que va más allá de uno mismo, la que trasciende, lo Sagrado.  

martes, 9 de diciembre de 2025

9 de diciembre de 2025. Martes.
AZUCENAS EN LA BOCA

Azucenas en la mente, antes que en la boca.  

-El cielo ayer, en honor a la Inmaculada, se vistió de azul, como la cúpula de un inmenso templo, dedicado a su Pureza. Los santos hablaron maravillas de la Inmaculada Concepción de María, como si llevaran azucenas en la boca. San Agustín, cautivado, decía: «No hay nada más hermoso que la pureza de María». Y añade que el Sí de María, por el que Dios se hizo hombre, no fue solo físico: «Primero concibió a Jesús en su fe, en su mente, y en su corazón, y solo después, en su vientre.». Y es que, Diario, los milagros siempre suceden tras la fe.

lunes, 8 de diciembre de 2025

8 de diciembre de 2025. Lunes.
MARÍA, MORADA LUJOSA DE GRACIA

María Inamaculada, en Javalí Viejo. Murcia.
Escultor: Sánchez Lozano.

-Inmaculada Concepción. En previsión de la muerte de Cristo, Maria, en su concepción, es liberada del pecado original. Dios se complace en María, que va a ser, durante nueve meses, la morada donde su Hijo habite. Morada lujosa de gracia y limpia de cualquier mácula o sombra de imperfección. María es poesía en el corazón de Dios –lleva la Palabra en su seno–, es belleza nueva, himno en el que se oye la melodía del Emanuel –“Dios-con-nosotros”–. Es ánfora de Dios, la gracia la colma, desbordándola. Es el temblor de la plegaria, es el adviento, que grita: «Ven, Jesús, no tardes», haciendo nacer la  esperanza en el corazón de los humildes. Su seno es Navidad, donde Jesús es retenido nueve meses, mientras se hace Niño, para nacer en Belén. Dios te salve, María, saludo brotado de la boca de Dios. Yo, Diario, bendigo a María, por el Sí frutal y sagrado que dio a Dios, y que el Espíritu Santo fecundó, dándonos al Salvador.

domingo, 7 de diciembre de 2025

7 de diciembre de 2025. Domingo.
DESPOJARSE DE LO VIEJO 

Mirando hacia afuera, leyes de la tierra. 
Casa Sacerdotal. Murcia

-La ley de Cristo es distinta de todas las leyes de la tierra. Las leyes de la tierra miran hacia fuera, a la periferia, la ley de Cristo mira hacia dentro de uno mismo. Es una llamada al corazón. La ley humana pretende ordenar las relaciones entre los seres creados; la ley de Cristo, que es amor, hace florecer, como base de su eficacia, la justicia y la paz. Sin justicia y sin paz, el amor se diluye, o se hace enfrentamiento, deja de existir. «Que en sus días florezca la justicia  y la paz abunde eternamente», dice el salmo 71. Y el evangelio: «Se acerca el Reino de Dios. Convertíos». Convertirse es vivir en justicia y en verdad. La conversión consiste, según San Pablo, en despojarse de lo viejo y vestirse de la nueva ley del amor, en la que se hallan Dios y el prójimo, tan cerca uno del otro, Diario, que sin amor al prójimo, no puede haber a amor a Dios.