sábado, 21 de septiembre de 2024

21 de septiembre de 2024. Sábado.
INACABADA CLARIDAD, EN SAN PEDRO DEL PINATAR

Presentación "Inacabada claridad". San Pedro del Pinatar. Murcia

-Y se recogió la cosecha en San Pedro del Pinatar. Una cosecha abundante en palabras y versos, con oídos atentos y celebrativos. Inacabada claridad, poemario recién salido de la imprenta, ya está ante esa «inmensa minoría» que la gustará (o no), en silencio. Así el silencio se alía con la belleza para darla al corazón y, de este modo, sentirla y gozarla, y, llegado el caso, decirla, como se avienta el trigo en la era. Doy gracias a San Pedro del Pinatar y a mis amigos, por haber podido decir mis versos, hacerlos vuelo, y ver el mar. Estas gracias es extienden a Carmelo Guillén Acosta y a Francisco Javier Díez de Revenga y a todos los que han hecho posible esta fiesta del verso, esta sinfonía inacabada de las letras; gracias a Paco Illán Vivas y al director del Museo, Marcos Gracia, a la concejal de Cultura, Carmen María López, a Valentín. Gracias a todos; también, mil gracias a Laura, a Gema y a Charo, por recitar mis versos, Diairo, con saliva y música de mujer, como el que oye palabras de ángel. 

viernes, 20 de septiembre de 2024

 20 de septiembre de 2024. Viernes.
VERSOS, EN SAN PEDRO DEL PINATAR

Anuncio del acto, cuidado y bello. San Pedro del Pinatar.

-Lloviznó ayer. Se alegró la raíz del almendro. Cuando llueve, la naturaleza se siente acariciada por el cielo. Esta noche, en San Pedro del Pinatar, versos, como espigas en un inmenso trigal. Presentación de mi libro de poemas Inacabada claridad. ¿Un poco nervioso? Pues, sí. Aunque voy a encontrar un ambiente cercano y propicio. San Pedro es como andar con zapatillas por casa. Fue, durante diez años, mi hogar y sigue siéndolo. Y, como se siente la mano de una madre en la frente calenturienta del niño, voy a ver y sentir el mar. Sentir el mar, como dijo Julio Verne, es la encarnación de una existencia sobrenatural y maravillosa. Gracias por todo, oh Dios, y tú, San Pedro, alégrate con mi gozo y mi alegría. Esta noche, Diario, ponte a mi lado y recita conmigo a Dios y su creación, hazte palabra y verso en mis versos, hazte epifanía santa. 

jueves, 19 de septiembre de 2024

19 de septiembre de 2024. Jueves.
EMPEZAR A VIVIR PARA ALGUIEN

El sol, luz dispersa, obra del amor de Dios. Salinas de San Perdro. Murcia

-Decía el filósofo y escritor exitoso Femando Savater que «el amor es dejar de vivir para algo y empezar a vivir para alguien». Y es que el fanal del amor debe ser singular. El amor no es luz dispersa, desparramada, sino luz concentrada en alguien a quien puedas decir, musitando su nombre y mirando sus ojos, «Te amo». Dios, que es amor, es uno en esencia: tres personas y un solo Dios. Amor que se da en la cruz, redimiendo, y gracia, alentando. Es lámpara que arde en la noche e ilumina, o flor que se expande en el aroma. El punto de partida es la lámpara y la flor: como Dios, Diario, del que todo parte, como luz que crea, y misericordia que redime. 

miércoles, 18 de septiembre de 2024

18 de septiembre de 2024. Miércoles.
SUBIDA AL MONTE

Virgen de la Fuensanta, fuente de Dios. P. Prensa.

-Ayer, la Virgen de la Fuensanta fue subida –asunta– al monte, la que antes bajó para estar con los suyos, los que lloramos en este valle de lágrimas. Bajó como un manantial y sube como la nube de Elías, para interceder por sus hijos, para estar en sus alegrías y en sus penas, en los de cada día. María, fuente de gracias inacabable y santa, es «bendita entre todas las mujeres». La romería al monte de  la Virgen es el rosario más bello que reza Murcia a su madre cada vez que la sube o baja de la montaña. Rezan las flores, las palmas, los vítores, las lágrimas, los bebés en brazos de sus padres, los silencios del que contempla absorto el caminar de la imagen hacia la montaña, donde vive y espera, y ama. Con humildad en mis palabras, Diario, pido a la Señora que nos proteja siempre, como la Madre que cuida de sus hijos. Amén. 

martes, 17 de septiembre de 2024

17 de septiembre de 2024. Martes.
UN SÍNTOMA DEL FRACASO DEL HOMBRE

La naturaleza mira al hombre asombrada. Torre de la Horadada.

-El odio crea armas de muerte, cada vez más letales, más destructivas. La guerra, su inspiración más sangrienta, las concibe y las realiza con crueldad. Primero fue la flecha y la maza, hasta llegar a la bomba de Hiroshima. Las guerras son la Torre de Babel de la modernidad: se trata de retar a Dios, que es desafiado por la libertad que Dios dio al ser humano. En la guerra, unos ganan dinero y un sucio prestigio, y el resto muere, o huye despavorido. Y es que olvidan lo dicho por San Agustín: «Toda guerra es un síntoma del fracaso del hombre como ser que piensa». Y un hombre rico fracasado, es un peligro; al hombre fracasado rico lo mueve, en sus actos, la soberbia, la vanidad, la inmodestia, el afán de poseer más; el afán de suplir el amor de Dios por el amor a lo que muere con el ser humano: la vida y su entorno, el dinero y la fama, la soberbia. ¿Cuándo, Diario, caerá esta Torre de Babel y se hará la paz en la tierra? Sigo rezando. 

lunes, 16 de septiembre de 2024

16 de septiembre de 2024. Lunes.
SUELTA DE VERSOS

Dentro del libro, leyendo, y fuera, dándolo. Mula. 

-El viernes, en San Pedro del Pinatar, suelta de versos, como un lanzamiento de palomas al aire. Versos que hablan de la belleza de la creación: la obra de Dios. Cuando contemplamos una obra de arte, valoramos la obra y al creador. Hay veces que observamos un paisaje, nos deslumbra, nos maravilla, pero olvidamos que es paisaje de Dios, y que Dios, sin ser el paisaje, está en él. «Me visto de lámpara y ternura, de amor por todo lo que existe», digo en el poema que abre el libro, «como si la única mirada con que se puede mirar el mundo, fuera la del corazón», dice en el prólogo Carmelo Guillén, poeta. Dios, que cinceló y formó mi corazón, miro todo desde ese corazón, para celebrarlo, bendecirlo, exultarlo. Dios en mi boca y en mis versos, Diario; es decir, Dios en lo más hondo de mí. 

domingo, 15 de septiembre de 2024

15 de septiembre de 2024. Domingo.
EL BESO DE JESÚS

Cristo dolorido. Velázquez. Museo del Prado. 

-El dolor está ahí, al otro lado de la esquina de la vida. En cualquier recodo nos encontramos con el desgarro del dolor. Sin buscarlo, desde luego, sería absurdo; pero está, para recordarnos, que aunque «enamorado», somos polvo, animado por el soplo –espíritu– de Dios. Soplo de Dios, revestido de arcilla y fragilidad, con las que, en ocasiones, se esconce y fractura ese soplo de vida que nos alienta, y chirría, y da forma al dolor. Aunque el  cristiano no busca el dolor, pero sí su sentido. El sentido del dolor cristiano consiste en incorporarlo a los sufrimientos de Cristo y que se haga redentor. Santa Teresa de Calcuta decía que el sufrimiento es «el beso de Jesús: una señal de que te has acercado tanto a él, que él puede besarte». Y tú a él, Diario, como el beso dado a una madre o a un padre, entrañable, festivo, de aleluya. 

sábado, 14 de septiembre de 2024

14 de septiembre de 2024. Sábado.
UNA PUERTA DIFÍCIL Y ESTRECHA

Besando nuestra salvación, maravilla. F: Prensa.

-Si deseas saber lo cerca o lejos que estás de Dios, no mires en tu derredor; detente y mira dentro de ti, es posible que ahí encuentres la distancia que media entre él y tú. El reino de Dios, dice san Lucas, está dentro de ti. Y, si está el reino, está su rey, su Señor. Sin embargo, la puerta de entrada a este reino es la cruz, una puerta difícil y estrecha, llena de clavos y espinas, que desgarran sentimientos y vanidades. Es decir, para acceder a este reino hay que bajar la cabeza y caminar por la humildad. Como decía Catherine Doherty, joven rusa convertida: para entrar en el reino de Dios «hay que arrodillarse». Una cruz solo se puede recorrer, de los pies a la cabeza, de rodillas y desechando inmodestias, dejando que te alcancen su sangre y sus espinas; para al fin, Diario, llegar a la muerte de Cristo, y su resurrección. 

viernes, 13 de septiembre de 2024

13 de septiembre de 2024. Viernes.
SABER QUE NO ESTAMOS SOLOS

Abro un libro, abre una rosa, maravilla.  Murcia.

-Cuando no sé qué escribir, leo, y la lectura me abre las puertas de la escritura. La lectura es descanso para el cuerpo y para la mente, e inspiración: vuelo de aves amigas en mi cabeza. Los libros conversan con el lector y le invitan a soñar: un paseo de la mente por lugares inesperados. Leer un libro es conocer paisajes y personas que nunca hubieras visto ni conocido. Que hermoso lo dicho por el inglés William Nicholson, autor de los guiones de Gladiator, «leemos, dijo, para saber que no estamos solos». Y Ray Bradbury, el autor de Fahrenheit 451, una novela inquietante de persecución y quema de libros: «No tienes que quemar libros para destruir una cultura. Simplemente haz que la gente deje de leerlos.» La lectura de un buen libro, Diario, te enseña a vivir y a convivir, a abrir caminos en tus sueños, a detectar vida allá no llegan tus pies. 

jueves, 12 de septiembre de 2024

12 de septiembre de 2024. Jueves.
LA BELLEZA DEL ALMA

El amor de Dios, en la eucaristía. Belleza. Varsovia. Polonia.

-Decía San Agustín que la belleza crece a medida que crece el amor, porque la caridad misma es la belleza del alma. El amor, o el arma que desactiva cualquier maldad y es adorno de la belleza. El amor no envejece; el amor, con más años, madura y es más delicado y entrañable, se viste de mejor sabor. El amor es como el vino viejo, madura y toma cuerpo con el tiempo. Con razón aseguraba San Agustín, que con el amor al prójimo el pobre es rico; y sin amor al prójimo, el rico es pobre. Dios es amor, dice San Juan; el amor es la vida de Dios y la vida del ser humano, concebido y hecho, Diario, a imagen de Dios. 

miércoles, 11 de septiembre de 2024

11 de septiembre de 2024. Miércoles.
ÁRBOL DE LA MÚSICA

Casuarina y paloma, desde mi balcón. Murcia.

-Digo con Irene Vallejo, la inspirada autora de El infinito en un junco, que ciertos días la ventana es la única promesa de aventura, de salir de mi mismo. Para ella, una ventana; para mí, un balcón con una visión impagable: las casuarinas, árbol de la música le llaman, protegiendo palomas y tórtolas, y bellas tocatas fugas de Bach. La belleza de un paisaje nace del corazón del que lo mira, de un interior que tenga capacidad para el asombro y aptitud abierta para el vuelo. Decía el poeta y filósofo suizo Henri Frédéric, que «cualquier paisaje es un estado del espíritu». Si el espíritu es limpio, azul, y sin perjuicios, el paisaje que contemple será claridad y emoción, belleza; si por el contrario es sucio y astroso, espeso, el paisaje que vea será un desolado panorama de vides muertas, donde viven alimañas, y un dilatado e inseguro desierto improductivo. Yo, Diario, quiero contemplar cualquier paisaje con la bondad y la humildad del que mira la mano de Dios embelleciendo la tierra; paisajes que muestran un destello –solo un destello– de la perfección de Dios. 

martes, 10 de septiembre de 2024

10 de septiembre de 2024. Martes.
UN SOL APAGADO E INSERVIBLE

Un pequeño gorrión, a punto de iniciar el vuelo, su libertad. Murcia

-Se me hace un nudo en la garganta, como de versos airados, que no me deja coger el sueño. A veces me despierto y el sueño salta de mis ojos, como impulsado por un muelle resentido. Lo veo irse de mí y no lo puedo atrapar: es mi triste pájaro volador que piensa en la crueldad del mundo. Guerras, muertes violentas, niños aplastado por la botas de los opresores, pueblos sin porvenir. Es el egoísmo que rige el mundo, como si se tratara de un sol, que en vez de luz, dieras sombras, lenguas envenenadas de avaricia, risas que supuraran odio, charco de ranas croando. Un sol apagado e inservible, macilento. Solo Dios me alivia, Diario, de esta especie de desgana, de este lamento que sale de mí en forma de palabra, y que, sin embargo, busca la esperanza. 

lunes, 9 de septiembre de 2024

9 de septiembre de 2024. Lunes.
SABLES EN LA BOCA

Luna triste, de guerra. Torre de la Horadada. 

-Escribo y la libertad pasa de mis dedos al papel, y lo llena de luz, de cercanía, de paz. La libertad es paz, nunca guerra; al contrario que la guerra que es polémica y cruel: sables en la boca, arañas en los ojos, beligerancia. La paz acoge; la guerra disgrega y enfrenta. La paz es creativa; la guerra, destructiva. La paz es Cristo en el monte de las bienaventuranzas; la guerra, por el contrario, son políticos y poderosos enfrentados en las contiendas, con las que lamen, como su único dios, al dinero. Dinero, Diario, que como dice el salmo, no se podrán llevar consigo a la tumba. 

domingo, 8 de septiembre de 2024

8 de septiembre de 2024. Domingo.
SEMBRAR AMOR

Pan y vino, donde Cristo se cobija, en la Eucaristía. San Blas. La Ribera.

-Hoy, fiesta del Naciniento de la Virgen María, quiero recordar al Papa Francisco, que, en Indonesia, se ha despido de los fieles, animándoles «a sembrar amor con la Palabra de Dios». ¿Y cómo se consigue algo así? Si se ama al anunciar el evangelio, y también en los silencios que le siguen; es decir, en la oración. El evangelio es palabra y vida; si se da solo palabra, se la suele llevar el viento; si vida, la palabra se hace ejemplo y cala en el oyente. No es lo mismo prometer trigo que dar trigo, suele decirse. Las palabras quedan en un libro o mueren, los hechos, sin embargo, permanecen. Cristo multiplicó los panes y murió en la cruz: es la Palabra hecha carne y dada a comer en la Eucaristía. Por eso puede decir Jesús: «El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna». Todo ofrecido y dado en la cruz, su cuerpo y su sangre, símbolos de su amor. Cristo, desde su sacrificio en la cruz, predicaba y daba amor, sin mirar a quién. Pidamos a María, su Madre, Diario, que nos ayude a seguirle, siempre,

viernes, 6 de septiembre de 2024

6 de septiembre de 2024. Viernes.
EN LA ÓRBITA DEL CAOS

Todo pasa, también los grandes imperios. Éfeso. Turquía.

-Quiero reír y no puedo: hay demasiado drama y lamento en el mundo, demasiada desesperación. Intento reír y me sale un gemido, un rosal sin rosas y con amenazadoras espinas. El mundo y sus habitantes se mueven en la órbita del caos, como en una luna loca. Me tiembla el mundo en la cabeza y me sale por la boca en forma de queja, de llanto. Rezo y siento algo de consuelo; pero sigue la angustia: a mi espera, Diario, le falta paciencia, tal vez caridad, o más esperanza. 

jueves, 5 de septiembre de 2024

5 de septiembre de 2024. Jueves.
UNA INMENSA MINORÍA

"Inacabada claridad" y el autor, en su estudio. Murcia.

-Ayer me visitó Cristina, periodista de la Cope. Llega con una inmensa sonrisa y la grabadora, en la que guardará una cordial entrevista. Yo, que siempre me he resistido a las entrevistas, la dejo hacer y hablo de mis cosas: cuento anécdotas, lances de mi vida, el modo cómo me sale un libro. «Hoy –me dice– ya no se lee», y yo le contesto que no leen los que nunca han leído, aquellos que jamás han sentido la emoción de abrir un libro y dejar que sus mensajes les hablen y dejen en ellos la huella de su paso por su espíritu. Pero aún queda gente que lee y deja su impronta en líneas subrayadas y anotaciones en los espacios en blanco de cada página. El día 10 de octubre, a las 12 h. presentaré en la Casa Sacerdotal mi nuevo poemario, Inacabada claridad, publicado en la colección Sudeste, de la Editorial Balduque de Cartagena. Una edición bellamente acabada: una preciosa joya editorial. Gracias a la Cope y a Cristina, por resaltar la importancia que tiene la palabra poética y dar la noticia de la presentación de un nuevo poemario a través de las ondas, para que llegue al más escondido rincón de nuestra geografía. Es un detalle, Diario, que la «inmensa minoría», inquieta e ilustrada, y liberada, que aún se emociona ante la lectura de unos versos, agradecerá. 

miércoles, 4 de septiembre de 2024

4 de septiembre de 2024. Miércoles.
SENDERISMO ESPIRITUAL

La luna nos mira y ríe, en el jardín. Torre e 

-Ayer viajé a San Pedro del Pinatar. Mi objetivo, hacer senderismo espiritual; es decir, visitar a amigos deteriorados. Ya apenas pueden andar, pero ríen, te miran –sobre todo te miran– y se emocionan, y esto, bien vale un viaje de 60 kilómetros. El 29 de agosto, Diario, nos dejaron los vencejo; hasta el año próximo no harán más arabescos en el cielo, lugar de su escritura acrobática y festiva. Ellos alaban al Creador así, volando; buen viaje: aquí, en esta página, dejo vuestro recuerdo, amigos. 

martes, 3 de septiembre de 2024

3 de septiembre de 2024. Martes.
LA FELICIDAD TE INVADIRÁ

La luna, sonrisa liminosa de la noche. Torre d ela Horadada.

-Dijo san Agustín: «Ama y haz lo que quieras»; y yo digo: «Si amas, la felicidad te invadirá, se hará risa en ti, alivio en tus ahogos». Que el amor guíe tus pasos y la felicidad te cercará, se arrimará a ti y caminará contigo, destilando bien por donde pases. Tus pasos dejarán huellas de amor, que más tarde pisarán otros y sentirán que le felicidad les toca y los penetra, los colma. Digo con San Agustín: Si callas, si corriges, si perdonas, si ayudas, si te das por amor, Diario, la felicidad estará en ti y ninguna otra cosa, sin amor, serán tus frutos.

lunes, 2 de septiembre de 2024

2 de septiembre de 2024. Lunes.
LAS COSAS PASADAS QUE AMAMOS

Clavel soñando que fue raíz, en el jardín. Torre de la Horadada.

-Los recuerdos, esas avecillas que de vez en vez revolotean en nuestra mente, poblándola de vida pasada, de entrañables o trágicos acontecimientos, de risas y llantos, de baladre y amapolas. Recrearte en un recuerdo, es volver a vivir lo pasado. Los recuerdos nos hacen aferrarnos a las cosas pasadas que amamos, las cosas que nos han hecho, que somos, y que no queremos perder, asegura un dicho anónimo. Dice Khalil Gibran, poeta libanés: «El ayer es el recuerdo de hoy y el mañana es el sueño de hoy». Dios, Diario, es el recuerdo de dónde venimos, el ayer; y el sueño –la realidad– de adónde vamos, el mañana. 

domingo, 1 de septiembre de 2024

1 de septiembre de 2024. Domingo.
UNA PALMADA EN EL TIEMPO

Belleza del atardecer rosa del día: un instante. Torre de la Horadada.

-Dice el salmo 144, que vida del hombre es como un soplo. En el tiempo que dura un soplo se dice una palabra, se hace una reverencia, se desvanece una sonrisa. Da igual que vivas setenta u ochenta años, al final todo se reduce a un recuerdo que dura lo que la visión de un paisaje al otro lado de la ventanilla de un tren en marcha. La vida es como una palmada en el tiempo: un saltar de palomas asustadas. Acaba un mes y empieza otro, y ves que la vida se te va de las manos y no puedes hacer nada por detenerla. En todo caso, consolándote en lo que viene, la otra vida que no acaba: la vida con Dios. Dios no pasa, ahí está, tanto si se confiesa o se niega, en la blasfemia o en la alabanza, en la fe o fuera de la fe. Como dice San Juan en el Apocalipsis: es el que era y el que es, el que, dándose amor, siempre está.