4 de octubre de 2023. Miércoles.
DÍA DE
FELICITACIONES
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Jazmín azul, en el jardín. Torre de la Horadada, Alicante. |
-«Te di el soplo, la
palabra –dice Dios– y tú, con mi soplo, diste forma a la arcilla, inventaste el
poema, recreaste la belleza». Éstas u otras parecidas palabras diría Dios a
Francisco de Asís, el santo mínimo, el de la pobreza y la sonrisa., el que
hablaba y miraba siempre desde abajo, el vestido de andrajos, y sin embargo,
luminoso, inflamado de Dios. Y él, Francisco, con el regalo de Dios, la
palabra, cantó al sol y a la florecilla, y al agua y al fuego, y a toda
criatura, y, aunque no lo dijera, también al silencio, donde a veces se oye al pasar,
como rumor de brisa, Dios. Pues con este nombre vivió mi madre Francisca,
pequeña, graciosa, pero, como Francisco, llena de Dios. Con pocas, pero sabias
y alegres palabras, y que, a pesar de los años y las dolencias, nunca la oí quejarse,
siempre anduvo con alabanzas a Dios en su boca, como en una abadía consagrada.
Y mi sobrina Paqui (Francisca María), ese don con el que fueron enriquecidas
las islas Canarias, que, con Candela a su lado, dan luz al siempre radiante y
bello paisaje de Las Palmas. Felicidades en vuestra onomástica, Paqui y madre
Francisca, que Dios os bendiga, a ti, madre, en el cielo, y a ti, Paqui, en Las
Palmas, en la que derramas, con belleza de jazmín azul, tu bondad y tu
sabiduría, y tu calidad espiritual. Hoy, Diario, es un día especial, en el que
sólo caben las felicitaciones a mis seres más queridos, en los que estoy y por
los que rezo, y que, en su recuerdo, descanso.