13 de junio de 2024. Jueves.
COMO
MONTADO EN UN TIOVIVO
Anteayer, al levantarme, todo me daba vueltas, como si fuera montado en un tiovivo de feria Sentado en la cama, esperé que pasara el mareo; pero al ir a ponerme en pie, he tenido que apoyarme en la pared para no caer. Ha venido el enfermero y tengo bien la tensión y la azúcar; son las cervicales, me ha dicho. Y aquí estoy, varado como un barco y esperando que pase todo. Rezo y digo a Dios que sea lo él quiera, y sonrío. Llamo a la cocina y aviso de que no puedo bajar a desayunar, y explico lo que me pasa, y Santi, la cocinera, me dice: «Eso es cosa del tiempo» –tormentoso y desabrido–, y le contesto: «Sí, es cosa del tiempo que ha pasado desde que nací». Reíamos, y espero. Dios dirá. Volvió a llover, con abundancia de río. Calles de Murcia inundadas y carretas cortadas. Pero ha llovido.