3 de noviembre de 2015. Martes.
INVISIBLE
Pureza invisible, y en invierno, en Tallin. Estonia. F: FotVi |
-Una vez oír decir a un
sabio: «Tanta es mi fe en lo que no veo, que a veces dudo de lo que veo». Y
quedó mirando su conciencia, invisible, pero terca en hacerse notar cada vez que
sus acciones la llamaban a hacer juicio sobre el valor moral o ético de las
mismas. La conciencia no se ve, Diario, pero está, como el odio o el amor, o el
pesar o la alegría, o la Trascendencia (20:29:27).
No hay comentarios:
Publicar un comentario