26
de septiembre de 2024. Domingo.
EL DON DE ADVERTIR Y ANUNCIAR
EL DON DE ADVERTIR Y ANUNCIAR
-La profecía es el don
de advertir y anunciar, de hacer presente hoy lo que ocurrirá en el futuro. Es el
don que el Espíritu Santo regala a los profetas, para que sirvan a la comunidad,
denunciando errores e iluminando caminos. El profeta es el enviado de Dios que
detecta la piedra y la señala con su palabra, para que no se tropiece en ella,
evitando caer. Moisés, en el libro de los Números, ante la denuncia de unos
jóvenes, muestra este deseo: «Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta y
recibiera el espíritu del Señor». Habrá llegado, entonces, la plenitud de los
tiempos: el fin de la etapa de espera ante la llegada a la visión de Dios. Si
se profetiza en nombre de Dios, Diario, es Dios el que habla y no puede decir
palabras vanas, vacías, inútiles, sino palabras cargadas de vida: con destellos
de eternidad
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