domingo, 25 de agosto de 2024

25 de agosto de 2024. Domingo.
UNA RESPUESTA DIFÍCIL

La cruz de Cristo, presidiendo cualquier iglesia. Tallin. Estonia. 

-Seguir a Jesús es una opción personal e intransferible. Se trata de hacer de nosotros un acto de fe, continuo y formal. La fe es un misterio; es un don de Dios al que hemos de dar una respuesta. Una respuesta difícil, o por el ambiente que nos rodea o por nuestra debilidad. Porque no se trata solo de creer en Jesús; se trata de aceptar lo que nos dice. El estilo de vida que nos propone Jesús es exigente y va muchas veces contra nuestro egoísmo o nuestra comodidad, o contra el oropel que nos rodea y nos seduce. Los valores del evangelio no son los que aplaude el mundo. Seguir el estilo de vida de Jesús es la servicialidad, el perdón de las ofensas, el amor, la vocación, la amistad, todo lo que es donación y no actitud egoísta. Y esto, para toda la vida. Difícil, Diario, pero posible, ayudados por el otro misterio de la gracia de Dios, que sobreabunda, según san Pablo, nuestras necesidades. 

sábado, 24 de agosto de 2024

24 de agosto de 2024. Sábado.
RASGANDO TINIEBLAS

Luz, a la puerta de mi casa. Torre de la Horadada. Alicante

-Si apago la vela de la fe, quedaré oscuras y morirá mi esperanza y, con la esperanza, el amor. Y es que fe, como decía San Agustín, es creer en aquello que no se ve; pero la recompensa de la fe está en ver aquello que crees. Es decir, la recompensa es ver y tocar el amor de Dios: diluirte en ese amor. También decía San Agustín: «Enamorarse de Dios es el romance más grande; buscarle, la mayor aventura; encontrarlo, el más grande logro humano». La fe es un buscar constante, sin tregua, «hasta dar a la caza alcance», como decía San Juan de la Cruz. La fe no descansa ni reposa, Diario, es una vela encendida que nunca se acaba, siempre arde, desaloja oscuridades y rasga la tela de araña de las tinieblas que nos cercan. 

viernes, 23 de agosto de 2024

23 de agosto de 2024. Viernes.
DIOS AL FONDO

Jesús ríe, el mundo ríe. F: Prensa.

-Canta el salmo 118: «Dame inteligencia, Señor, y tendré vida». Se hace esta petición a Dios, desde la humildad del ser necesitado. El Diccionario define la inteligencia como el acto de entender y comprender. Pedir pan es lógico. El comer es parte de nuestra vida; pero la inteligencia es el otro alimento de nuestro espíritu, el que nos distingue de los demás seres vivos de la creación. La inteligencia nos permite aprender, discernir, retener, saber, escudriñar, averiguar, buscar, descifrar, intuir, vislumbrar, apreciar, dar… La inteligencia nos dispone para andar felizmente por la vida. Es la razón por la que yo cada día le pido a Dios un poco de pan, con algo frugal, sobrio, conque comerlo, y mucha inteligencia; cosa que, a pesar de pedirlo con fe, aún no lo he conseguido del todo. Pero, como el calor del verano, Diario, sigo en ello. La oración es insistencia, cierta pesadez, audacia, paz, y siempre percibiendo a Dios al fondo, con una sonrisa de bondad.

jueves, 22 de agosto de 2024

22 de agosto de 2024. Jueves.
SOPLO DEVINO

Diciendo palabras, en Mula.  Museo Ibérico. Murcia

-El ruido no me molesta: si es el aleteo de una palabra en mi boca. Las palabras no hacen ruido, dicen cosas, alagan al oído y lo llenan de significados. Decir “siento” es poner un latido del corazón en la boca que lo dice. «¡Siento la belleza; siento que amo!», solemos decir. Las palabras son ese soplo devino en la mente y en la boca, que echan sus raíces en el corazón. El Verbo, la Palabra de Dios se hizo hombre y vino a habitar entre nosotros, dice la Escritura. Pero las raíces estaban en Dios, recibiendo el flujo de su amor. La Palabra del Padre, puso su tienda junto a nosotros, habitó con nosotros. En el evangelio, Diario, la Palaba nos habla desde el mismo corazón de Dios, haciéndose presente en quien pone su oído atento a la escucha, como Teresa de Jesús o Juan de la Cruz, o María, la madre de Jesús. 

miércoles, 21 de agosto de 2024

21 de agosto de 2024. Miércoles.
UN JARDÍN DE BELLAS FLORES

Gardenias, en el jardín. Torre de la Horadada.

-Leo, con emoción y reflexión, un pensamiento de la carmelita Belén de la Cruz, que dice: «Solo tengo lo que he dado». Es el “haber” en la cuenta corriente de la generosidad, donde no suena el ruido del dinero, sino el discreto y hermoso silabeo del amor. El amor tiene el sonido de las manos que se chocan o del beso que se da en la mejilla del desfavorecido. Besar la herida de un indigente, es besar una llaga de Jesús en la cruz, y acompañarle en la soledad de la cruz. Esa soledad que clama al cielo: «¿Por qué me has abandonado?» En las matemáticas de Dios, solo lo que das tiene valor. En la caja fuerte del corazón de Dios se guardan esos valores que has ido consiguiendo a lo largo de la vida, cuando has curado una herida o has dado un vaso de agua al que tenía sed. Dios, pues, Diario, en el evangelio de lo que das, como en un jardín de bellas flores. 

martes, 20 de agosto de 2024

20 de agosto de 2024. Martes.
UN BUEN LIBRO

La humide luz de la noche, la luna naciente. Torre de la Horasdada. 

-Si leo un buen libro, me siento andando por parajes del alma desconocidos y por el camino ancho de la sabiduría, donde habitan la fantasía y, a lo lejos, la utopía. En la utopía relucen todos los soles de la imaginación, y se dan cita todos los imposibles que alguien pueda soñar. Imposible es la luz en la oscuridad, y sin embargo, se puede pensar, imaginar, investigar. ¿Qué pasaría en un mundo de total noche o tenebrosidad y soñar que podrías dar la luz a ese mundo? ¿Por qué no soñar que en un mundo en tinieblas se pueda encender una cerilla –la cerilla del amor– que repliegue las tinieblas y nos deje ver la luz? Ah, Diario, leyendo un buen libro y permitiéndole entrar en ti, qué bello se hace soñar: alegrarás al libro y te ayudará a caminar por sendas de amor, donde suele hallarse Dios. 

lunes, 19 de agosto de 2024

19 de agosto de 2024. Lunes.
LA LIBERTAD ME HABLA

Antes de echarse a volar, paloma pensando en la libertad, Murcia,

-Escribo, porque soy libre. Y digo lo que pienso y siento, apoyado en mi libertad. Sea con pluma o máquina, la libertad me habla y me dice: «Sé libre; rompe cadenas, aunque sean afectivas». La libertad no tiene color, es un impulso maravilloso que nace de lo más íntimo del ser humano, y se expresa en los ojos, en las palabras, en los sueños, y respeta la libertad de los otros. Sin embargo, como decía Voltaire, uno de los insignes representantes de la Ilustración: «Es difícil liberar a los necios de las cadenas que veneran». Yo, Diario, valoro el ejercicio de la libertad como un don, que, venido de Dios, valoro en su justa medida. Soy libre, mientras no daño ni piso la libertad de los otros, y me hace ser mejor. Sigue el calor; amén. 

domingo, 18 de agosto de 2024

18 de agosto de 2024. Domingo.
CONVERTIDO EN PAN

La Virgen y el Niño, en una iglesia excavada en la roca. Göreme, Capadocia, Turquía.

-Cristo, convertido en pan, se nos da como Alimento. Cristo, humildemente escondido en un trozo de pan y un sorbo de vino, nos invita a comerlo y a beberlo. Puesta la mesa, el banquete está servido. Palabras de Isaías: «Venid a comer mi pan y a beber el vino». «La Sabiduría ha preparado el banquete». Luego diría Cristo: «El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él». Es la misma unión que él tiene con el Padre. «Igual que yo vivo por el Padre, el que me come vivirá por mí». Es decir, él mismo es nuestro alimento y nos comunica su propia vida. Cristo, mi viático, Diario, me conduce por caminos de bien; caminos que llevan a la vida eterna. 

sábado, 17 de agosto de 2024


17 de agosto de 2024. Sábado.
DIOS, EN EL SOL

El sol, dominando el mar. Torre de la Horadada. 

-Poco a poco, como un ciempiés que ardiera, está volviendo el calor. Hemos pasado tres días felices y ya se están acabando las perdices de la bondad del clima. Volvemos a las andadas. Pero ya el calor no vuelve en forma de ola, terrible, su vuelta es simplemente calor, sin más. Y se agradece. Decía Roman Payne, novelista y poeta: «¡La luz del sol! El oro más preciado que se puede encontrar en la tierra». El sol es riqueza, dádiva, claridad, encendida llama, hoja y flor en el árbol; el sol saca el día de la noche y lo pone a crear, a trabajar, y es riqueza. El oro no se guarda, simplemente se tiene, y es fortuna aun para el pobre, con el que se calienta y vive. Dios, pues, en el sol, Diario; como en el mar, como en todo, destellando. 

jueves, 15 de agosto de 2024

15 de agosto de 2024. Jueves. 
 ALZADA AL CIELO 

Asunción de María, Bernabé Gil. Molina de Segura. Murcia

-Asunción: María llevada, arrancada de la tierra y alzada al cielo. Hoy el orgullo de nuestra raza, María, la madre de Jesús, ascendida al cielo. Toda ella: en cuerpo y alma. Como una procesión con luces de estrellas, de la tierra al cielo, hasta dar con Dios, que la espera jubiloso. Es la preciada rosa del jardín de Dios, que embellece la belleza. Como dice el himno de Laudes, es columna que no cesa; columna que rasga, horada el cielo, hasta que se pierde en el azul sorpresa, donde Dios aguarda. Y allí está María, Diario, como mediadora, entre su Hijo y la humanidad, como intercesora de gracia y ayuda, como inspiradora de santidad.

miércoles, 31 de julio de 2024

31 de julio de 2024. Miércoles.
EN EL ESTRIBO DEL TREN DE LA VACACIÓN 

Ayer amanecía así en Murcia, perfecto. 

 -Con un pie en el estribo del tren de la vacación, levanto el brazo y me despido de ustedes, querido amigos. Con una lágrima de regocijo en los ojos y la mano en alto, digo adiós y, con el pitido de la máquina del tren, me pongo en marcha. La velocidad emborrona el paisaje, y yo, repantigado en mi asiento, abro un libro, El Principito, de Saint-Exupéry; me adentro en sus aventuras y vengo a ser un niño como él, que nace de los sueños y se realiza soñando. Como él, amo a una flor y un amigo, el Zorro, el tierno animal que a veces me aconseja. En estas estoy, cuando llego a la parada de la vacación y me echo en brazos del descanso, la lectura y algún verso que se me ocurra; es decir, vaco, huelgo, vivo en reflexión y contemplación, de la que dice San Juan de la Cruz que es «secreta, oscura, amorosa», y tierna, digo yo, pues me concentra en mí y me libera. Diles, Diario, que volveremos pronto, que no nos abandonen; diles que, como el Principito a la rosa de su asteroide, los amamos mucho. Y gracias por todo.  

martes, 30 de julio de 2024

30 de julio de 2024. Martes.
ERA VERDE EL SILENCIO

Un hilo de agua, un hilo de vida. Torre de la Horadada. 

-Pablo Neruda, artista de la palabra y de los sentimientos más íntimos, habla de junio, mes en el que da sus primeros pasos el verano. «Era verde el silencio –dice–,  humedecida era la luz, temblaba el mes de junio como una mariposa». Pero con el calor, el verde se torna rojizo; la luz, gota a gota, fue perdiendo su humedad, se desaguó, y el mes de julio puede que tiemble, no como una mariposa, sino como un león herido por la flecha del despótico calor, que le espera en julio. Con todo, Diario, que Dios bendiga el verano y a sus moradores, sobre todo al más indigente y necesitado: el que vive entre la escarcha y el ardor veraniego, el desheredado por la injusticia. 

lunes, 29 de julio de 2024

29 de julio de 2024. Lunes.
LA VACACIÓN INSPIRA

El árbol, en invierno, sueña aventuras. Toerre de la Horadada, Alicante.

-En este tiempo de calor y la lírica elegiaca del fuego, me viene a la mente una palabra: vacación. ¡Ah! Mientras en vacaciones relajo el cuerpo, pongo en actividad la mente, que se hace verso o lectura, o ensoñación. Cualquier trabajo cansa, menos el de soñar aventuras, que luego puedes poner por escrito. Como hizo Mark Twain, el humorista y escritor estadounidense, y viajero, que dejó dicho: «La clave para tener éxito es hacer de tu vocación, tus vacaciones». Y es que la vocación es una inspiración que viene de Dios y te obliga a perfeccionarte en ese estado, iluminado, de tu vida. Te obliga a convertir en verso, texto, salmo –alabanza–, libro, u obra artística, desde el descanso, los mundos que sueñas y las voces que oyes mientras sueñas. Vocación y vacación, dos palabras, Diario, que se encuentran en el infinito mundo de la ensoñación, donde sucede el más bello y sencillo milagro, el de poder escribir cosas reales, y prodigiosas, antes soñadas. 

domingo, 28 de julio de 2024

28 de julio de 2024. Domingo.
DIOS SIEMPRE ES ADVIENTO

Dios, en su creación, nunca es monotonía, siempre es novedad. Torre de la Horadada.

-Dios siempre es adviento; es decir, es esperanza, expectación, alegría de algo nuevo que él nos va a ir dando. Dios no es motonía, pasado, siempre es presente en el que está brotando lo que ha de venir. Con el profeta Isaías, nos dice: «No penséis en lo antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya está brotando, ¿no lo notáis?» Todo lo que hace Dios es novedad, primicia: ningún día se parece a otro, ningún atardecer es igual al anterior. Todos los días perdona y siempre el perdón es un gesto de amor distinto, con un brillo distinto al anterior. «¿No lo notáis?», nos dice el profeta. Cada brote en el árbol de la vida, es gracia distinta, original, especial. Dios no se repite, es infinito en todo, también en darnos cada día una esperanza nueva; «agua en el desierto» y «ríos en la soledad», dice el profeta. Dios, Diario, original, aun en la originalidad. 

sábado, 27 de julio de 2024

27 de julio de 2024. Sábado.
LOS ABUELOS DE JESÚS

María con sus padres,dando sus primeros pasos. F: Prensa.

-Ayer, fiesta de san Joaquín y santa Ana, los abuelos de Jesús. Me imagino a Jesús niño: sus juegos, sus risas, las travesuras del bebé con sus abuelos. Un niño normal y unos abuelos cariñosos, que atraerían a Jesús y lo abrazarían con cuidado, para no romperlo. Siempre tienes la sensación de que puedes dañar un ser tan frágil, tan quebradizo. Es como tener una nube, un lío de algodón entre los brazos; un hermoso juguete con vida, que ríe y hace pucheros, gesto que precede al llanto. Y es que como dijo Jacinto Benavente, dramaturgo, «en cada niño nace la humanidad». Y, en Jesús de Nazaret, además, Diario, surge la humanidad redimida, la ternura purificadora, el amor de Dios elevado a la categoría de Niño, del que, desde una cruz, de mayor, nacerá un mundo y una tierra nuevos: el mundo de la paz y del amor, y la justicia.

viernes, 26 de julio de 2024

26 de julio de 2024. Viernes.
DOS MODOS DE IMAGINAR

Luna ardiente, propia de verano. Murcia.

-Sigue el calor inmisericorde, como un dragón de cuento de hadas echando fuego por la boca. Saco la mano por la ventanilla del vagón del tren de la vida en el que viajo, y la he retirar rápidamente, me la quema. Recuerdo las noches tórridas en la cámara o piso alto en el que yo dormía de niño. Vueltas y vueltas en la cama, hasta que me echaba al suelo, y allí lograba pegar ojo. Ahora, si pudiera, hay noches que dormiría en el suelo, sobre las losas frescas, pero no me dejan los huesos ni la falta de agilidad en moverme. Sin embargo, cuando no puedo dormir, oigo música serena, sedante: un adagio, o motetes de Palestrina y de Tomás Luis de Victoria: esa música nacida del amor a Dios, me deja dormir y aun soñar. Dormir y soñar, Diario, dos modos de imaginar, de crear, velando. 

jueves, 25 de julio de 2024

25 de julio de 2024. Jueves.
TEMPLO DE LOS SILENCIOS

Jesús, la Palabra de Padre, ríe. F. Prensa.

-En un centelleo intelectual de querer alabar el silencio, decía Anna Blandiana, poeta rumana, que «la poesía nunca estuvo hecha de palabras, sino de la serenidad que hay entre ellas. El propósito de la poesía es restaurar el silencio». Restaurar el silencio, como se restaura una catedral gótica o el canto de un pájaro en el recuerdo. La palabra bien dicha, no rompe el silencio, lo embellece y lo hace virguería, refinamiento, en el diccionario de la elegancia. Dices una palabra y lo que queda de ella en tu memoria eso es la poesía; no es la palabra en sí, sino el rumor, la gracia que destila su recuerdo en ti. Sin embargo, Diario, son necesarias las palabras, las que dan forma al templo de los silencios, en el que Dios –le he oído– habla. Santiago, en esta hora, bendice a España.

miércoles, 24 de julio de 2024

24 de julio de 2024. Miércoles.
AMO LAS PALABRAS

Cruz, signo y palabra de redención. Goreme. Turquía.

-Andar por las palabras, con el cuidado de la pisada de ave en la arena, es el mejor ejercicio para mantener la salud del espíritu. Diseccionar una palabra es hacerla más lúcida, más transparente, y, al saberla más de ella, amarla más. Amo las palabras porque me hacen ver las cosas más cerca. Si nombro una cosa, la recreo, la hago nueva. Si digo manzana, la estoy sintiendo en la boca, lo mismo que si digo gajo de naranja. Las cosas se tocan con las manos y se mastican con las palabras. Por algo Dios llamo a su Hijo Palabra, y la llenó de vida y mundos nuevos. El templo de Dios, Diario, es su Palabra, donde habita con el Espíritu, y desde donde escribe la Escritura, el gran libro que salva, con la palabra. 

martes, 23 de julio de 2024

23 de julio de 2024. Martes.
ME CONSIDERO MENDIGO

Chopos, fresibles como juncos, invencibes. Turquía.

-Yo, como san Pablo, bendigo mi debilidad. Cuando soy débil, entonces soy fuerte, decía él. La gracia suple aquello de lo que carece la debilidad. Yo me considero mendigo –y no es postureo– en la búsqueda de Dios. Sé que Dios se halla al lado de la limosna que pido, y en la humildad de quien la ofrece. Dios sonríe en la sencillez, y llora en la soberbia. Dios se hace visible en la mano del pobre que pide y en la mano del pudiente que da. La moneda es el símbolo del amor que doy y del amor que recibo; Dios anda, pues, Diario, en la moneda que va y viene, amando.

lunes, 22 de julio de 2024

22 de julio de 2024. Lunes.
NO EXISTE LA CASUALIDAD

Fuego vegetal en el jardín. Estambul. Turquía.

-Hablamos del azar, de la suerte, del destino, de la casualidad. Yo, en las posguerra, cuando faltaba el pan y tenía hambre, me asomaba a la chimenea a ver si caía algo de arriba  «Si existe la casualidad, ¿por qué no?», digo ahora, no entonces que no sabía nada de estas cuestiones. Nunca cayó nada, solo, cuando hacía viento, un poco de hollín. Mi madre se enternecía y yo lloraba. Mi madre me consolaba dándome un beso en la frente, y esto sí me calmaba el hambre, me lo escondía. Esta mañana de lunes leo a Schiller, dramaturgo y poeta, autor de la célebre Oda a la alegría, que dejó escrito: «No existe la casualidad, y lo que se nos presenta como azar surge de las fuentes más profundas». Las fuentes profundas del trabajo, el esfuerzo, el sacrificio, Diario, y Dios, el Alfa y la Omega de todo. Dios, o ese hermoso silencio, que, si prestamos atención, habla frecuentemente a nuestro interior, señalándonos caminos: caminos de Dios.