16 de diciembre de 2016. Viernes.
SALTAR AL INFINITO
Existe un más allá, en el aire hacia Canarias. F: FotVi |
-Nos es frecuente ni digno de asombro («¡oh!») ver la
noticia de diez jóvenes luchando por ser los mejores en aquello en que se
afanan o sueñan. Bien sea la música, el deporte, la política, la medicina, la
investigación. Soñar, o romper el techo de la fe y de las cúpulas, de los
telescopios, e irse a las estrellas y desde ellas saltar al infinito. Más allá de
toda idealización, más allá del cosmos y de la ley de la gravedad. Pero con los
pies en la tierra y en el trabajo, en el esfuerzo de cada puntada bien dada y a
punto de coser, y juntar, lo descosido. Van desde los 17 a los 32 años: así de
jóvenes y así de avispados son para no dejarse llevar por la mugre de la resignación
o el aquí me las den todas. No quieren aparecer recostados en el sofá del no
hacer nada y con un cigarrillo y una copa de indiferencia en la mano, riéndose
amargamente del mundo y de su propia e inútil peripecia vital, de su torpeza
sin sueños. Estos diez jóvenes quieren soñar y hacerlo con euforia, con
embriaguez de utopía, con casi un lascivo deseo de triunfo. En esta época de
crisis, del nini (ni estudia, ni trabaja), estos jóvenes, Diario, dicen que
existe un más allá donde han intuido el éxito, el laurel del premio, la
exaltación de la recompensa (18:45:52).