13 de agosto de 2023. Domingo.
MIRAR A JESÚS AMÁNDOLO
MIRAR A JESÚS AMÁNDOLO
-¿Cómo hablar de Jesucristo sin haber conversado, dialogado, departido antes con él? Es la finalidad de la oración. ¿Cómo hablar de fe si no tienes trato, roce, comunicación con quien es objeto de la fe? ¿Cómo te vas enamorar de quien no galanteas? Dice el evangelio de este domingo que Jesús, luego de la multiplicación de los panes y después de despedir a la gente, «subió a solas al monte para orar». A hablar con su Padre. La oración es una charla para cortejar a aquel que intentas conocer en el detalle de sus gestos: si ríe o llora, si es brisa o es tormenta, si ternura o antipatía. ¿Cómo tener esperanza sin haber tocado en las palabras de Jesús el adviento, ávido, de la espera? ¿Y cómo saber lo que es el amor, sin haberse rozado con el Amor? Tadeuz Daczer, teólogo autor de libros de encuentro y hallazgo de Dios, dice: «Orar significa mirar a Jesús amándolo». Con la oración, Diario, lo poco que uno dé contemplando a Jesús, éste, con su mirada, le devolverá el doble; en esa transacción espiritual –intercambio de miradas, tu mirada y la de Jesús–, al fin hallarás la dulce amistad de Dios, y en su sonrisa te llenará de Amor (12:09:49).