17 de septiembre de 2023. Domingo.
LOS HABITANTES DE LAS NOCHES SIN TECHO
LOS HABITANTES DE LAS NOCHES SIN TECHO
-Anteayer llovió con
furia desatada. En diferentes lugares de la región, agua, granizo, aire
huracanado, inundaciones, alarma. Yo pienso en los que, viviendo la pobreza
extrema, no tienen dónde guarecerse. Son, como dice el Papa Francisco, «los
descartados de la sociedad». Los que no sirven, los olvidados. Mientras oía el
sonido, casi musical, de la lluvia, rezaba por ellos; es decir, los ponía ante
Dios para que calmase el furor de las aguas. Miro, contemplo la tormenta y
pienso en los demás. Es la otra tormenta de mi corazón. Quizá una tormenta
extrema sirva para unirnos en la solidaridad, en buscar soluciones, en actuar. Si
se hacen puentes para que haya intercambio de bienes entre la humanidad, ¿por
qué no construir viviendas donde puedan refugiarse los habitantes de las noches
sin techo? Los políticos son los que
manejan y despilfarran, a veces, nuestros impuestos, sólo piensan en sueños
de poder. Señor, que los políticos, en vez de puentes –y pinganillos no
necesarios en el Congreso–, piensen en estos «desterrados hijos de Eva», y que
además de la manta o el cartón protectores, le den un techo bajo el que
cobijarse, para que puedan así soñar y leer, y, en día propicio, contar estrellas. Y
tal vez sentir a Dios, en el que confían. Oh Señor, pon cordura en nuestros
dirigentes, hazlos maleables, cercanos al pueblo, y no soberbios parásitos
innobles (12:04:24).