27 de octubre de 2023. Viernes.
TRISTEZA INFINITA
TRISTEZA INFINITA
-Un día tras otro, haga
calor o frío, llueva o salga el sol, no dejan de llegar las embarcaciones de la
precariedad –cayucos las llaman– a Europa, cargadas de inmigrantes y muerte, y
llegan por Canarias, por el litoral italiano, por toda la costa mediterránea.
Llegan a miles; otros cientos quedan en la fosa de los mares, sin llegada a
tierra, en todo caso llegan a la tierra de Dios, sin pedirlo, descanso eterno, la otra tierra prometida. Tristeza infinita, llanto por tanta
fatalidad, la de la pobreza y la del mar, que esclavizan, y matan. Y producen
llanto, tanto como agua llena los océanos. El mar rebosa con sus lágrimas y las
peces se acercan a sus lamentos y los comen como cosa suya: el mar es de las
tormentas y los peces, no de los humanos y la pobreza. El mar, belleza
inacabable para la visión, es muerte y entierro para los que se atreven con él;
el mar, Diario, nunca pierde, o casi nunca; su belleza y su grandeza son así,
deslumbrantes, y temibles.