2 de agosto de 2022. Martes.
ACONTECIMIENTO DE PALOMAS
ACONTECIMIENTO DE PALOMAS
-Ayer andaba yo trajinando en el ordenador con las palabras,
cuando sonó el teléfono. Cuando suena el teléfono se me aceleran los latidos.
El teléfono, a mi edad, suena de tarde en tarde, sólo si algún amigo perdido
osa meterse en mi intimidad y llenarla de saludos. Cogí el teléfono y vi que
era Paqui, mi sobrina; me dio un golpe de alegría. Me anunciaba que venían por
la tarde a verme: ella, Javi, y la preciosa y espigada Candela. Ver a mi
familia en casa es como si viviera un acontecimiento de palomas. Llegaron
Paqui, la gracia, Javi, la bonhomía, y Candela, la joya de la corona, que
apenas habla y siempre sonríe. Ha crecido como cree un rosal, con alguna espina
y muchas rosas. Y las suyas, por nacer del espíritu, son rosas que no mueren, están
hechas del aliento de Dios. Dios sopló el barro, y fueron hombre y mujer, y amaneció el amor. Hablamos de todo: también de cuando yo falte, y rieron, pensando que a
ese instante –feliz– aún le falta; ellos ríen y yo pienso, y, a pesar de sus
palabras de ánimo, sé que estoy en la pista de salida. A punto de despegar y
encontrarme en la otra orilla de Dios. Y no estoy triste, simplemente me fío de
Dios. Al fiarme de Dios desaparece toda inseguridad, y no me importa dormirme
en un sueño y encontrarme en la feliz realidad del más allá. Luego, en vísperas,
Diario, recé por mi familia, porque como decía Antonio Gala, escritor, una
familia es el lugar donde uno siempre es esperado (12:49:16).