19 de diciembre de 2016. Lunes.
LLUVIA CON IRA
Aguas crecidas, en el río Segura. Murcia. F: FotVi |
-Luego de la tormenta, viene la calma; ha dejado de
llover y la ciudad sale de su aturdimiento y se dispone a ser ciudad normal y
andariega, laboriosa. Ya pasó lo peor; o lo mejor, salvo por lo de la
abundancia desmedida. No es igual que llueva o que diluvie, como no es lo mismo
decir unas pocas palabras sabias, que muchas irreflexivas y descuidadas. Algunos
políticos y curas desatinados y patéticos saben algo de esto: hablan y hablan sin
lograr alcanzar el fin, que casi nunca tienen. Hoy he salido a pasear, y he fotografiado
el río, que parece un Ebro, tan crecido va. En Los Alcázares, inundaciones: la
plaza del Ayuntamiento va a rebosar: corre el agua como un inmenso río, que se
precipita en el mar. La lluvia, sí, pero con modales, cortés, sin salirse de
madre. ¿No puede ser una lluvia cordial, mansa, sin cóleras desatadas? Yo, Diario,
pediría un término medio: lluvias pacíficas, como una mano que acaricia, y sin
iras descontroladas (19:28:52).