1 de enero de 2025. Miércoles.
FELIZ AÑO NUEVO

Cueva de la sal, en Wielizcka, Cracovia. Polonia.

-Contemplo la cifra 1 y me emociono. Decir 1 es empezar de nuevo, como el niño que da sus primeros pasos. Qué vacilaciones, qué dudas, hasta que echa a andar, y siempre con una sonrisa y la emoción de sus padres. Y la madre que le espera con los brazos abiertos, acechando la posible caída. Hasta que llega a los brazos de la madre, su seguridad. 

Pienso en la que dijo Borges: «Cada palabra, aunque esté cargada de siglos, inicia una página en blanco y compromete el provenir». Una página en blanco es el año que empieza: página que hay que llenar de vida, de fe y esperanza, de amor; es decir, de acontecimientos tristes y alegres, líricos y prosaicos, y siempre con Dios al fondo, guiándonos en ese caminar desconocido y distinto, pero esperanzador. 

Feliz Año Nuevo, Diario, que nos traiga prosperidad y libertad, y sueños nuevos: un mundo habitable y más humano, en el que reinen la justicia y la equidad, y la paz. 

 

31 de diciembre de 2024.  Martes.
CENA DE FIN DE AÑO

Flor llorosa: acaba el año. Torre de la Horadada. Alicante.

-Esta noche, cena de fin de año. Nos desbordará la alegría. Es una manía perversa celebrar el tiempo que pasa. Cumpleaños, Nochevieja, Año Nuevo, todo aniversario..., tantas celebraciones del tiempo que pasa y no vuelve. 

Aunque quizá sea una reminiscencia cristiana celebrar el paso del tiempo: «Cuanto más rápido pase el tiempo, más cercano tengo a Dios, que espera en la otra vida», debe pensar el creyente. Es lo que se me ocurre. 

San Agustín unía la existencia del tiempo a la acción creadora de Dios. El tiempo no existía: «comienza –dice el santo– con el “hágase” creador de Dios». Dios nos ha creado para la eternidad, y mientras recorremos el presente, nos hacemos merecedores o no de compartir con él, ese instante sin tiempo, que es la eternidad. 

Quizá sea esta la razón, Diario, por la que vestimos de fiesta el paso acelerado del tiempo: nos acerca a Dios. (12:11:31)

 
(Aquí finaliza el 4º trimestre del año. Doy fe de ser el autor de estos escritos, a la edad de 91 años. Poder escribir a esta edad es un regalo de la Providencia, que, a pesar de mis faltas y yerros, me sigue obsequiando con su amor y su benevolencia. Cada día le pido a Dios que me dé vida, si así lo tiene a bien, y que pueda seguir escribiendo palabras en su honor y alabanza. Y aquí sigo, escribiendo y dando gracias).

30 de diciembre de 2024. Lunes.
QUÉ BELLA Y DESCANSADA META

Mar sereno, paz para el navegante. Lo Pagán San Pedro. Murcia.

-Hoy y mañana –dos pasitos de nada– y llegaremos al inmenso mar océano de un año nuevo: 2025 se llamará. Y como Colón, en nuestra barquita de vela –nuestra frágil vida– nos echaremos a navegar por esta enorme masa de dificultades –alto oleaje– que es un año, y, si salimos ilesos, será una bella aventura más en el haber de nuestra vida, que recordaremos con nostalgia. 

Yo, por si acaso, he contratado un buen timonel: mi ángel de la guarda, que estará en contacto con Dios y me guiará por rutas de bien. 

Decía Santo Tomás de Aquino, al que Dios bendijo dándole el don de la sabiduría, que «los ángeles cooperan en roda obra buena que hacemos»; y San Basilio Magno indicó que «al lado de cada creyente hay un ángel como protector y pastor que lo conduce a la vida». 

Con esta guía, Diario, creo no perderme y conseguir la meta; es decir, al Dios que llamamos Padre, Hijo y Espíritu, y es todo Amor. Qué bella y descansada meta: la del pleno e infinito Amor.

29 de diciembre de 2024. Domingo.
LA DE NAZARET, FAMILIA CONSAGRADA

La familia de Nazaret, amorosamente unida.  F: Facebook

-Hoy celebramos el día de la familia, pero también de la familia consagrada en Nazaret: familia dirigida por José y María y santificada y hecha humanidad por Jesús; es la familia de Dios en la tierra, que siempre prestó oídos a la voluntad del Señor. 

San Juan Pablo II definió a la familia como «patrimonio de la humanidad», pues, a través de ella, se asegura la continuidad del ser humano en la tierra. «Todo ser humano significa un enriquecimiento y una aportación original al patrimonio de la humanidad». 

Cada ser humano, único e irrepetible, es una obra maestra de Dios. La familia es el nudo más bello y frágil que pueda existir: se ata fuertemente– belleza–, pero a veces, sin saber cómo, este lazo –fragilidad– se desata y puede causar estragos. 

Pidamos que la familia de Nazaret proteja, tutele, y bendiga a las familias que tengan dificultades y que las guíe por caminos de comprensión, ternura y reconciliación. Que esté en el perdón de cada día, en el amor de cada instante, renovándolo siempre. 

¡Ah, mi pequeña y maravillosa familia de la tierra, Diario, cómo la amo!

28 de diciembre de 2024. Sábado.
MUERO RIENDO

Muerte en África, el fanatismo de los yijaditas. F. Prensa.

-Cada día muero, un poco. Y muero riendo: aunque no siempre; hay veces que, por tanto dolor como existe en el mundo, me veo llorando. Andar por este mundo es, en ocasiones, como una pesadilla dolorosa, atormentada, angustiosa. 

El bello himno de la Salve, con el que nos dirigimos a María, la Virgen, lo llama «valle de lágrimas». Un mar inmenso de lágrimas, colmado lágrima a lágrima. 

Todos los días mueren inocentes. Menos mal que nos queda el consuelo de la oración, en la que se alientan la fe y la esperanza, y el amor: las dos poderosas columnas que lo elevan y sostienen. Ah, la fe, la esperanza, las dos columnas, y, como capitel coronándolo todo, el amor, el que perdura, el que es siempre el principio sin fin.

Nacimos por un acto de amor, y nos inmortaliza el Amor. Cada día muero un poco, Diario, y, salvo excepciones, muero riendo: la muerte es mi júbilo eterno, inmarcesible. 

27 de diciembre de 2024. Viernes.
DIOS ME SONRÍE

Cantando las alabanzas al Señor, las aves. Casa Sacerdotal. Murcia.

-Hay dos palabras en la liturgia en las que se podría resumir todo el concepto cristiano de la fiesta y el regocijo. Una es hosanna, que significa “salve”; y aleluya, con la que se expresa el gozo desbordado. 

En la Navidad, cantamos hosanna, y aleluya, en la Pascua, cuando resucita Jesús y todo es nuevo, con destellos de redención. 

Ahora, por las mañanas, salgo al balcón y, respirando hondo, digo: «¡Hosanna!», y en ese hosanna estalla todo el gozo interior por el nacimiento de Jesús. Mientras, me recreo viendo pasar las aves migratorias, varios meses ya, como gavillas de libertad, que cantan las alabanzas de Dios. 

Y pienso –perdón por si no es correcto– que mi oración da en esas aves y sube más directa a Dios. ¿Entelequia, Diario? Quizá; pero me ayuda. Dios, desde allá, me sonríe. 

25 de diciembre de 2024. Miércoles.
EL BELÉN QUE YO HAGO

Mi Nacimiento, con lágrimas. Los Acázares. 2002

-Y nació, y está entren ostros. Llegar a Belén y entrar en la cueva del Nacimiento, en su hermosa humildad, en la grandeza de su sencillez, en sus paredes tiznadas de humo, y pensar que allí nació el Hijo de Dios, es una experiencia en la que se hace más recia la fe, cautivando la cercanía de Dios y su inagotable amabilidad. 
Jesús nació entre la virginidad silenciosa de María y el asombro con olor a madera de José, el carpintero. Luego llegaron los pastores y, postrándose, adoraron el latido de Dios, que palpitaba en el corazón de aquel Niño, envuelto en pañales. 
De allí nació, en la inspiración de San Francisco de Asís, la idea del segundo Belén, el primero estaba allí, reluciendo de modestia y dignidad, haciéndose la Divinidad personaje humano, con llanto y sonrisa, y gorjeos. Es decir, el Belén que tú y yo, alguna vez, hemos hecho. Pero yo siempre pensé que en ese Belén faltaba algo, y, recordando, lo dije en este villancico que hoy, Diario, pongo aquí. 

24 de diciembre de 2024. Martes.
OS HA NACIDO UN SALVADOR

-«En aquella región había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando por turno su rebaño.

Y un ángel del Señor se les presentó: la gloria del Señor los envolvió de claridad y se llenaron de gran temor.
El ángel les dijo:
—No temáis, os traigo la buena noticia, la gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre.
De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:
«Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra, paz a los hombres que Dios ama».
(Lc. 2, 1-14)
No añado ni una palabra más, Diario, a lo narrado por San Lucas sobre el Nacimiento de Jesús en Belén. Sencillez y devoción, que, en mí, se convierten en adoración; adoración que, unida a la de los pastores, se hace universal. Amén.
En mi felicitación de Navidad, yo lo describí así. 

23 de diciembre de 2024. Lunes.

FELIZ NAVIDAD

-Fue en la Navidad de 2002, hacía frío y andaba yo por Los Alcázares, preparando el Belén. Pensaba, como años anteriores, en la felicitación. Y dos días antes de la Navidad, cuando los niños de San Idelfonso cantaban los números de la lotería, me vino la inspiración y compuse este villancico, sencillo, pero entrañable. Finalizado, me conmovió. Y aquí está, tal como lo di a mis feligreses. 

Sed felices, si así os parece. 

Así terminaba siempre mis felicitaciones, por si había alguna perdona que no le gustara ser feliz. La libertad, Diario, es un bien que hay que apreciar, y respetar. 

22 de diciembre de 2024. Domingo.
LA CORAL DISCANTUS, EN CASA SACERDOTAL

Coral Discantus, llenando al ambiente de villancicos. Casa Sacerdotal. Murcia

-Anteayer, escribía yo: «Ayer, día de pentagramas; es decir: musical», en la Casa Sacerdotal; y así fue: pues por la tarde siguió la música. Esta vez coral, que quiere decir, armoniosa, remansada, música para el gozo y la meditación, para la reflexión con melodías. 

Se nos vino con su director Ángel Luis Carrillo, la Coral Discantus, que nos regaló villancicos de Europa, de América, de España, acabando con nuestro Aguinaldo Murciano. Una delicia que se gustaba con la mente y el corazón, pero también, con la boca, degustando melodías, con ritmos diferentes, pero que arrebataban los sentidos. 

Finalizó el concierto, con estas palabras mías. «Buenas noches. He sido elegido para deciros una palabra que María Zambrano, en su discurso al recibir el Premio Miguel de Cervantes, llamó: «La palabra luminosa de la ofrenda»:es la palabra Gracias. Por pensar venir, por haber llegado aquí, la Casa Sacerdotal, por el Concierto tan deslumbrante y navideño que nos habéis regalado. Por todo ello, gracias  Y hasta otra vez que nos queráis sorprender con tanta belleza, sacada de las notas musicales. Gracias. 

Un fuerte abrazo de la Casa Sacerdotal. Casa joven..., aunque no lo parezca.

21 de diciembre de 2024. Sábado.
DÍA DE PENTAGRAMAS

Adiracioín al Niño Dios: la humildad ante la Imensidad. 

-Ayer, día de pentagramas; es decir, día musical. Por todos los rincones de la Casa Sacerdotal, notas musicales, villancicos asombrados, corcheas desparramadas, castañuelas de alegría, armonías perfectas. 

De mañana, los seminaristas vinieron y regalaron a nuestros oídos sus festivas melodías navideñas, como cada año. Ellos cantaban y saltaban; nosotros, necesariamente más moderados, reíamos y hacíamos palmas. Al final, compartimos un aperitivo, melodioso también. 

En los villancicos, la Navidad vino a nosotros y nosotros, en el Niño, que pusieron en nuestros labios, la besamos. La Navidad, Diario, ha de ser siempre un beso que se da al Niño que llora. 

20 de diciembre de 2024. Viernes.
UN ALTO EN EL CAMINO

Claustrodel monasterio Monte Saint Michel. Francia.

-Ayer, jueves, Retiro Espiritual; es decir: un alto en el camino. Dicen los evangelios que Jesús se retiraba al monte a orar: en este tiempo de Adviento, los seguidores de Jesús no retiramos al silencio y a la contemplación a conversar con Él de las cosas del espíritu, aquellas que nos hablan de la cercanía de Dios: de nuestro amor a Él y al prójimo. 

Ayer, Diario, en el silencio de las cosas, tratamos de oír a Dios.

19 de diciembre de 2024. Jueves.
NUEVO DICCIONARIO DE LAS COSAS BELLAS

La madre que duerme al hjo, con amor: F. Prensa.

-Arriba, el cielo, azul, extendido: en la luz que da, abrazo inmenso; abajo, mis pies, helados, concentrados en no tropezar. En la cabeza me da el azul y me llena de esperanza; en los pies, el frío me hace ser más fuerte. El cielo siempre me inspira, y tanto o más que el cielo, la tierra, donde vivo y vive las cosas que amo. 

En el cielo están las estrellas; en la tierra, el mar y las rosas, y las lágrimas del que sufre, que invitan a tender la mano y secarlas, el niño dormido en brazos de su madre. Amo la luz y las cosas iluminadas por esa luz, que, yo, diciéndolas, las hago palabra; es decir: otra luz. 

O la misma luz, Diario, ampliada, tocada por la gracia de Dios: el nuevo diccionario de las cosas bellas.

18 de diciembre de 2024. Miércoles.
ANIMAL DE COMPAÑÍA

Esperando un amo, que lo libere de su condición de monstruo. Catedral de Murcia.

-Hay frases, ideas, que hablan al corazón. Son expresiones que te penetran y ni el tiempo ni las adversidades las hacen apartarse de ti. Casi siempre, estas frases o ideas, nacen de la lectura de un libro, o de un trozo de papel que encuentras tirado en el camino, o de un buen amigo que te las dice, mirándote a los ojos. 

Yo suelo anotar todo lo que me parece hermoso, si lo es en sí. Hace tiempo, y no sé cómo,  anoté esta frase, hermosa y eminente: «Un verdadero amigo es quien te toma de  la mano y te toca el corazón». Como dice el poeta: tocar el corazón «con tacto que no pesa, con tacto de caricia»; es decir, sin herir. 

Vivir en la amistad es vivir unido a otra persona, pero sin ataduras, con libertad. .Y es que, Diario, como decía el filósofo e historiador griego Plutarco: «La amistad es animal de compañía, no de rebaño». 

17 diciembre de 2024. Martes.
UN FARO EN MEDIO DEL MAR

 

Un faro da lux en la oscuridad, salva. Cabo de Palos. Murcia,

-Si no llevo cuidado, tropiezo con los días, o me dejan atrás. ¡Todo va tan vertiginoso! Ayer lunes, hoy martes, pasado mañana jueves. Y compruebo, con asombro,  que yo siempre estoy donde mismo. Soy como un faro en medio del mar; eso, si, un faro cada vez más achacoso. 

La vejez también llega a los faros, pero con combustible, siempre siguen avisando. Te dicen: «No te acerques, aquí hay un peligro». Y el que ha ido iluminando el camino del barco en el mar, se va sin ni siquiera poder darle las gracias al farero, el que cuida de su luz. 

El barco se va, mientras el farero enciende un cigarro y espera hasta salvar al siguiente. Los días que pasan son el recuerdo de que soy polvo; mas, como dice Quevedo, Diario, –y por la gracia de Dios–, «polvo enamorado».

16 de diciembre de 2024. Lunes.
CUANDO REZO LOS SALMOS   

Los salmos, la música de Dios. De mis rezos: Libro de las hoaras.

     

-Cuando rezo los salmos, es como si pasara la vista por notas musicales, que cantaran la gloria de Dios. Cada sílaba del salmo es una nota, y cada una de sus estrofas, un bello acorde musical, que precede y sigue al otro. Cuando acabo el salmo, tengo la sanción de haber regalado una atractiva pieza melodiosa a Dios, que la vive y descansa en ella. 

En los salmos hay alabanza, acción de gracias, petición de indulgencia, enseñanza, súplica de hijos al Padre, recuerdo de la alianza de Dios con el hombre: la misericordia va regando como un crisma oloroso de benignidad cada una de sus palabras. 

La palabra salmo, en su origen, significaba tocar un instrumento y cantar, para alabar y celebrar a Dios, y recordarle la alianza que hizo con su pueblo. Es un himno, Diario, a la grandeza y bondad de Dios, a su modo, paternal y cercano de ir salvando al mundo y a la criatura hecha a su imagen, el ser humano. 

15 de diciembre de 2024. Domingo.
DIOS ES ALEGRÍA

El sol abriendo su luz, al amanecer.  Casa Sacerdotal

-La liturgia de este domingo es una invitación festiva a la alegría. Es la “alegría de la espera”. y la razón es que el Señor está en medio de su pueblo y viene a salvarnos. Vivir en la alegría es vivir en Dios; no la alegría efímera del bebido o el jaranero, sino la alegría que nace en el corazón y se desparrama, como ungüento oloroso, por todo el cuerpo: en la mirada delicada, atrayente; en los labios, con un rictus de sonrisa siempre, o en el moverse de las manos en el trabajo y en el saludo. 

Es la alegría de Juan el Bautista, que le hace saltar en el vientre de su madre, ante la presencia de Jesús en la visita de María a su prima Isabel, la alegría de los amigos del novio, o la alegría de los discípulos al ver al Señor resucitado. Es la alegría que brota de adentro afuera y no la que viene de fuera adentro. 

Cuando se lleva a Dios adentro, Dios irradia a través de los ojos, de los labios, de las manos, que se dan en servicio a los demás. Dios, Diario, es alegría, porque es amor. 

14 de diciembre de 2024. Sábado.

CON SABOR A NATURALEZA

Aroma de lirio, en mi oración. F: Paco.

-Si digo «¡oh, Dios, te amo!», mirando a un lirio silvestre o al cielo sin nubes, la oración sube al cielo con aroma a flor o a cielo abierto, azul; pero si esta misma oración la digo a mi corazón contrito y humillado, como dice el salmo, a Dios le complace más esta oración hecha desde un corazón embellecido por la humidad y el amor de la contrición, que toda la belleza externa del universo, la que tantas veces, sin embargo, Diario, nos ayuda a rezar y a alabar a Dios, con temblor y emoción. 

13 de diciembre de 2024. Viernes.
SI TE CANSA SER HUMILDE

Jesús, el Buen Pastor, desde la huildad.: F: Prensa

-Si te piropean por tu trabajo, una obra de arquitectura felizmente acabada o por un poema excelso, y te salen los colores a la cara, es que todavía eres honesto y, como al camaleón, te brota el pudor al rostro, cambiando de color. 

La humildad es la virtud que adorna a los santos y a los sencillos de corazón. Bienaventurados, dice Jesús, los humildes y sencillos de corazón porque ellos serán llamados hijos de Dios. Nada menos. 

La sencillez y la humildad son el camino y el bastón que llevan a la vida eterna. «Para llegar al conocimiento de la verdad –decía San Agustín– hay muchos caminos: el primero es la humildad, el segundo es la humildad, el tercero es la humildad». 

Y yo digo, Diario: si te cansa ser humilde, vuelve de nuevo a la sencillez y te encontrarás con la humildad perdida, la que, ante Dios, eleva de categoría y te acerca a él. 

11 de diciembre de 2024. Miércoles.
TOCAR LO PEQUEÑO

Lo Grande ante lo pequeño. F: Prensa

-Me gusta ver a lo grande abajarse y tocar lo pequeño, y lo pequeño, si empinarse, dejarse besar por la grande. He aquí lo hermoso de ser cercano, sin aspavientos, con naturalidad: una corana que se pone a la altura del necesitado, prestándole su grandeza y su sensibilidad. Su ternura. Besando lo pequeño, la corona toma nueva dimensión y se hace más grande, con el aplauso de lo pequeño, que, conmovido, se limpia una lágrima, agradecida. 

La Iglesia –con Dios– y unos reyes coronados y sin corona, se han unido para rezar y pedir a Dios por los fallecidos en la DANA, y consolar a los vivos. 

El profeta Isaías, escribe: «Consolad, consolad a mi pueblo –dice el Señor–» (Is 40,1) Hay que consolar, sin herir, haciéndolo a la misma altura del que sufre; y mas, Diario, desde la cruz, redimiendo.