1 de mayo de 2020. Viernes.
HÉROES DE LA
SUPERVIVENCIA
Día del trabajo, sin trabajo. Charlei Chaplin. |
-Hoy día del trabajo, me pongo a hilvanar palabras, como mi madre zurcía
mi pantalón o mis calcetines agujereados por el uso, y la escasez. Hacer una
frase, poner palabras en hilera sin que tropiecen entre sí, llenas de sintaxis
y corrección, y, como el grano de trigo, perfectas y comestibles, es un trabajo
ímprobo, digno de tenerse en cuenta. Y yo, cada día, como el orfebre, como la
mariposa, hurgo, libo en las palabras, y luego las artículo y las pongo en fila,
en orden de lectura. Para que se puedan ojear e interpretar, y decir. Y, si
acierto, miro al cielo y al diccionario, y doy gracias. Congratulándome con
Dios y la sintaxis, y la inspiración, que, si te pilla en la tarea, siempre llega,
decía Cela. Así celebro yo, desde mi entrada en el júbilo de la quietud, el
trabajo, ese don, esa tarea alegre que me acerca al Creador y me colma de
dignidad, con la libertad que da el remendar y poner palabras en hilera y crear
con ellas una historia, una odisea, quizá. Hoy, día del trabajo, y, no obstante, sin trabajo;
salvo el de aquellos héroes (sin quererlo, tal vez), que tratan de contener el
virus en los hospitales y los que se mueven de acá para allá para no dejarnos
sin algo que echarnos a la boca. O los héroes de la supervivencia. Hoy, las
señoras obreras de la Casa trabajan, con mascarilla y guantes, y una sonrisa;
sonrisa que, por lo de la mascarilla, solo se les ve en los ojos, celebrando así generosamente el día del trabajo. Como San José, que fue obrero en el silencio
y la aceptación, y cuidador del Hijo de Dios. Por lo que mereció, modelando la madera
y la humildad, Diario, el premio de la beatitud (12:35:52).