30 de junio de 2018.
Sábado.
ABRE EL MAR
Horizontes de luz, en las Salinas de San Pedro del Pinatar. F: Fotvi |
-Con
don Ramón María del Valle Inclán, que en Luces
de Bohemia convierte el grito de guerra «¡Santiago y cierra España!», en
«Santiago y abre España», yo, por la misma razón, podría decir «¡San Pedro y
abre el mar!». El mar parcelado, lugar de aves, de las Salinas, el pequeño y
amable (y mal cuidado) Mar Menor, el extendido y múltiple mar de Las Llanas. Un
extenso y libre mar, que hace más dilatado y audaz al San Pedro del Pinatar en
trance de fiesta y veraneo. Ayer estuve en San Pedro y viví la fiesta de su
patrón, el que guía la barca de su vida, el que señala sus caminos de paz y de
progreso, aparte de los que pasan de patronazgos y moldes que imitar. Yo me
quedo con la imagen de San Pedro, vigoroso y pensativo, una mano en la cruz y
en la otra una red de pescador, y un rostro que refleja un rictus de dolor
amargo, como si le pesara la conciencia por su pecado de la noche del gallo y
la negación. Pero una mirada, la de Jesús, hace que lo que fuera negación se convierta
en liberación, y en piedra sólida sobre la que levantar el nuevo testamento, el
de las utopías y el nuevo cielo, el de la nueva tierra; cielo y tierra en los
que habiten la justicia y el derecho, y la paz, como secuela, con su himno
glorioso de trompetas y tambores. En estos días de fiesta y holganza, pues, Diario, que sean muy felices todos los pinatarenses
y allegados, y cualquiera de corazón festivo que aparezca por allí, porque en San
Pedro se abre el mar a largos y bellos horizontes, sin fin (13:10:09).