viernes, 19 de noviembre de 2021

19 de noviembre de 2021. Viernes.
EL HISOPO DE LA LLUVIA

Luna llorosa, anoche, en el cielo. Casa Sacerdotal. Murcia. F: FotVi

-Han vuelto, emocionadamente, con la sencillez de una bendición, las lluvias. El hisopo de la lluvia ha exorcistado los campos y las montañas, y ha aumentado el caudal de manantiales y ríos, tocando, humedeciendo raíces del bosque y del trigal, que duermen en la tierra. En invierno, la belleza se enclaustra, se hace meditación e intimidad, reverencial plegaria callada. En primavera y en verano la belleza sale al exterior, y se hace flor precursora en el almendro, y más tarde trigal, y bosque inmenso: abundancia; hasta que llega el otoño, y, como una buena madre, duerme otra vez en sus brazos al invierno y lo hace lentitud, sueño de exuberancia, himno y germen de prosperidad. Con la pandemia, sin embargo, todo parece ser invierno, sin salida, como tapiados en la adversidad; no hay día que no den –televisiones, radios, prensa– una cifra penosa de muertos: 100, 50 –más o menos–, cifra siempre excesiva, inasumible, para llorar. Aunque vuelvo a Cervantes y él me da una lección de esperanza, y, con amabilidad de amigo, me corrige y me dice: «El hombre bien preparado para la lucha, ya ha conseguido medio triunfo». Bello axioma, Diario, que, desde el silencio y la humildad, intentaré poner en práctica, hasta dar con la primavera lúcida y florida del triunfo, donde se oscurezcan los miedos y aparezca la fortaleza del ser humano, don de Dios, iluminación que alienta y fortalece, y se hace belleza inmortal (17:57:16)

No hay comentarios:

Publicar un comentario