miércoles, 4 de diciembre de 2024

4 de diciembre de 2024. Miércoles.
AYER, FIESTA EN LA CASA SACERDOTAL.

Celebrantes en la capilla, Casa Sacerdotal. Murcia
-Ayer, fiesta en la Casa Sacerdotal, en la que hacía yo esta monición en el comienzo de la misa Episcopal.
«Hoy, amigos -dije-, nos reunimos para celebrar el 38 aniversario de la fundación de esta Casa Sacerdotal, en la que se da cobijo a los retirados, por los años, del ministerio sacerdotal: ministerio al que dieron generosamente sus luces y sus sombras, toda una vida, hermosa y entregada, y a veces crucificada. Nos reunimos para rezar juntos, ancianos y los menos vencidos por los años; nos reunimos los que aún tienen fuerzas para sembrar y los que sembramos y recogimos los frutos; no todos los que hubiéramos querido, pero sí algunos, y muy valiosos. Nos quedan, Diario, los recuerdos de aquella época, que conservamos en la memoria y la emoción de haberlos vivido.» (Mañana continuará). 

martes, 3 de diciembre de 2024

3 de diciembre de 2024. Martes.
FIESTA EN LA CASA SACERDOTAL

Capilla Casa Sacerdotal. Bendición. Murcia.

-Hoy celebramos fiesta en la Casa Sacerdotal. 
Hacer fiesta es esponjar, vivificar el espíritu, dar alas a la esperanza. En la Casa Sacerdotal hay gente joven y gente mayor que fue joven. Es decir, hay jóvenes que miran con ojos soñadores el futuro y jóvenes que miran, con ojos de añoraanza, el futuro ya ido. Se juntan, pues, el porvenir: la esperanza, y la ancianidad: la nostalgia.Como dice San Pablo, unos corren hacia la meta, y otros, después de haber dado con la meta, descansan, desliando recuerdos y volviéndolos a vivir en la añoranza. 
La juventud es porvenir; la ancianidad, despedida. 
Nos acompañará el Obispo, con su báculo y su mitra; es decir, con su autoridad y su palabra, la que señala caminos a seguir. Fiesta, misa, y comida de hermandad, con amigable charla entre todos, y poca sal en la comida, como Dios manda, Diario. 
¡Bella fiesta!

lunes, 2 de diciembre de 2024

2 de diciembre de 2024. Lunes.
NO DESFALLECER

Todo es regalo de Dios: esta florecilla también. Torre de la Horadada. 

-Si digo: «Un lunes más», y sonrío, estoy dando gracias a Dios por estas palabras y por la fiesta que se hace en mi boca al decirlas. Cada día que vivo es un festival en mi vida, que celebro escribiendo. Y rezando; pues todo es regalo de Dios. 
Cada día, sea lunes o domingo, doy gracias, y trabajo varias horas, poniendo a trabajar a Dios conmigo. Y, con Dios a mi lado, todo se hace más festivo y llevadero. Un proverbio sueco dice: «Aquellos que quieren cantar, siempre encuentran una canción». 
Mi canción, Diario, es no desfallecer y seguir sembrando, pues aunque haya semillas que caigan en el camino o entre piedras, siempre habrá una tierra buena en la que arraigue mi semilla. 

domingo, 1 de diciembre de 2024

1 de diciembre de 2024, Domingo.
RÍO CAUDALOSO DE GRACIA

Como una lámpara en la noche, velando. C. Sacerdotal. Murcia.

-La liturgia, como un río caudaloso de gracia, nos lleva una vez más a vivir el adviento. La esperanza viene a nuestra puerta y espera que la recibamos como una visita de salvación. Es una oportunidad más. 
«Dios, dice A. Pronzato en su libro El pan del domingo: «El hombre es fatiga de Dios, sufrimiento de Cristo. La liberación del hombre, su salvación, es trabajo, obra de Dios». 
En adviento, el hombre asciende y Dios se rebaja hasta la humildad de esperar a tu puerta, como dice Lope de Vega, a que le digas: «Pasa, sálvame”. 
Y ya dentro de ti, con su perdón, te da su paz, te libera, y, con la mano en el hombro, Diario, te dice: «Somos amigos, caminemos juntos»; y ahí está, a tu lado, salvándote de tus enemigos, y, aun a veces, de ti mismo.