18 de septiembre de
2018. Martes.
AL
COLE
Alegría, por volver al cole. Google. |
-Es la
hora del cole y los niños se ponen en cola -unos con lágrimas, otros con destellos
de ilusión llenando sus ojos- para dar comienzo a la etapa de los libros y las aulas, de la formación, del encauzamiento de su personalidad. Es darle la opción al niño a
que pueda existir como persona, como ser racional y libre, o un ser con expectativas
de triunfo. Educar, es desarrollar los ojos, los pies y las manos del niño, su inteligencia, para que pueda vivir -y defenderse- en la selva competitiva de la sociedad. La
selva, que puede ser jungla o simplemente fronda, o lugar de vida y muerte. Pues
como dejó dicho Karl A. Menninger, psiquiatra norteamericano: «Lo que se les dé
a los niños, es lo que los niños darán a la sociedad». O el «do ut des» («Te
doy para que me des») de los romanos. El niño dará en su vida, lo que haya
recibido en su niñez. Si le das música, te ofrecerá a Bach o el My Way de Paul Anka en sus
comportamientos; si le das poemas, te dará poesía, tocará la belleza y se
vestirá de libertad, de sueños; y si amor, triunfará en sus relaciones humanas,
viviendo y dejando vivir; es decir, andará por la senda del humanismo, valorando
a sus semejantes y a la circunstancia (Ortega) donde vive; y así, Diario, querrá
a la tierra, y la respetará, y se sentirá parte de ella, siendo, con su
inteligencia, la luz que la ilumina (18:24:56).