24 de julio de 2023. Lunes.
AYER VOTÉ SIN IRA
AYER VOTÉ SIN IRA
-Ayer voté sin ira, pero con fe. Y la fe mueve montañas. La ira destruye montañas, la fe sólo las cambia de lugar. La guerra es consecuencia de la ira, el ayudar al necesitado y vivir en paz con él es un destello de la fe. Vivir de la fe es vivir en familiaridad con Dios y con uno mismo. Yo estoy con Leon Tolstoi, que decía no ser posible vivir sin fe, porque la fe es la fuerza de la vida. Sin fe muere la esperanza y, con su muerte, se derrumban los sueños más bellos y constructivos, aquellos que permiten volar y redimen de la pesadez del desaliento. Voto con fe, para conseguir que, si alargo la mano a un semejante, le estoy alargando la paloma de la paz y no el grajo de la guerra, le estoy llamando amigo y no contrario; es decir, quiero vivir rodeado de esperanza y de verdad, libre, para seguir soñando, y poder así reír y llorar, según me plazca. Y desde mi fe pido a Dios que mi voto sirva para esta liberación, que es la parte más bella de mi existencia. No ha podido ser, Diario, quizá mi fe no ha sido tan firme como necesitaba serlo. Sin embargo, sigo confiando (12:41:28).