9 de noviembre de
2023. Jueves.
RECREAR LA BELLEZA
RECREAR LA BELLEZA
-Vuelvo a releer el Diario de Ana Frank y, aparte de la conmoción que me produce su lectura, siempre me quedo con alguna de las frases que hacen que cada vez ame más la caricia de la vida, don de Dios, aun con sufrimiento. Su alma, pura y delicada, ángel de la sonrisa, exterminada en el Holocausto, escribió desde la cruz de su vida; y desde esa cruz puso puntos de esperanza en cada una de sus frases. En una ocasión escribe: «No pienso en toda la miseria que hay, sino en la belleza que aún queda». Pensar en la miseria es hacerse miseria, degradación, meterse en el lodazal de la injusticia en el que tantas veces se mueve la humanidad. Ana Frank, desde su alma libre y llena de ternura, lujosamente maternal, se aparta de la miseria y carroña que la rodea y se hace bella en la belleza del mundo, se hace rosa de esperanza a pesar del lodazal en que vive: recrea la belleza. En Bergen Belsen, Diario, el odio nazi cortó la vida a una flor que empezaba a dar su aroma de luz al mundo que la mataba y al que tanto amó. Sin embargo, su cruz, unida a la de Cristo, fue cruz de esperanza para todo el que la mirase con amor y no con odio: es decir, los perseguidos por la funesta injusticia en la que tantas veces se mueve la humanidad, deshumanizada. A pesar de todo, para Ana, aún quedaba la belleza.