25 de julio de 2024.
Jueves.
TEMPLO DE LOS SILENCIOS
TEMPLO DE LOS SILENCIOS
Jesús, la Palabra de Padre, ríe. F. Prensa. |
-En un centelleo intelectual de querer alabar el silencio, decía Anna Blandiana, poeta rumana, que «la poesía nunca estuvo hecha de palabras, sino de la serenidad que hay entre ellas. El propósito de la poesía es restaurar el silencio». Restaurar el silencio, como se restaura una catedral gótica o el canto de un pájaro en el recuerdo. La palabra bien dicha, no rompe el silencio, lo embellece y lo hace virguería, refinamiento, en el diccionario de la elegancia. Dices una palabra y lo que queda de ella en tu memoria eso es la poesía; no es la palabra en sí, sino el rumor, la gracia que destila su recuerdo en ti. Sin embargo, Diario, son necesarias las palabras, las que dan forma al templo de los silencios, en el que Dios –le he oído– habla. Santiago, en esta hora, bendice a España.