19 de febrero de 2017. Domingo.
MARY´S MEALS, O (LAS COMIDAS DE MARÍA)
Pan y escuela, en el mundo. F: Europa Press |
-Hay murallas de piedra y murallas de sentimientos.
Aquellas se construyen con cimiento de mortero y rocas, y éstas, con latidos y
carne del corazón. Las murallas hechas de piedra y mortero son derribadas o, si
perduran, se llenan de hierbas y lagartijas y quedan, como dato histórico y
nostalgia, para la posteridad; las hechas de corazón, sin embargo, son más
duraderas y más terribles, se establecen donde los sentimientos, y allí cortan
y dividen, hasta matar. Cuando se cierra el corazón, es como si se cerraran
todas las cárceles del mundo -y de la fantasía- hacia adentro, y con alambres
de púas hacia el exterior, que pinchan y desgarran si se tocan. Es lo que está
ocurriendo en el mundo, y en la Europa eufórica de hoy, en la Europa recostada
en sí misma, en su decadencia espiritual y solidaria. Gritan las murallas
coronarias que cierran Europa, que cierran su entrada a la migración. Sin
embargo, hay latidos que se oyen a veces y están sonando: o en las calles -manifestaciones-,
o en hechos concretos, relevantes, de solidaridad. Empiezan a caer murallas. Leo:
«Cómo alimentar a un millón de niños desde un cobertizo», y entro, al trapo, de
considerarlo y admirarme. Una ONG, la Mary´s
Meals (Las comidas de María), ha logrado este milagro diario de dar de
comer en cobertizos a miles de niños de la calle. Un pedazo de pan, y la
escuela; o un plato de comida, y matemáticas, geografía, gramática, lectura…, y,
si cabe, un poco de Dios, con el bocado al pan. Un tal Magnus Macfarlane-Barrow
tuvo esta idea: primero el pan con algo que lo acompañara, y luego la ciencia, como
júbilo y lumbre para el espíritu, como liberación de la mediocridad; y la
apertura además de nuevos sueños encendidos, donde se reconstruya cada día el
mundo y se haga la luz. De Magnus fue la idea, y de miles de voluntarios, la
continuación, la consumación del milagro: y así, Diario, pudieron multiplicarse
los panes, y las sonrisas, y recuperar los juegos de los niños en las calles, con luces en los ojos (18:55:26).