lunes, 9 de enero de 2023

9 de enero de 2023. Lunes.
TOMA MI VIDA

María dijo: «Sí», e ilminó el mundo. F: Zacarías Cerezo.

-No basta decir amén a Dios, hay que vivir ese amén, día a día, aliento a aliento. Vivir el amén es activar las potencias del alma y ponerlas a su servicio. Con la memoria, recordamos lo que es Dios y todo aquello que nos ha dado. Ejemplo: El despertar a un nuevo día y maravillarnos, extasiarnos; poder decir: «¡Vivimos!» Con el entendimiento conocemos a Dios y pensamos en él. Decía san Juan Pablo II que todas las cosas, todos los acontecimientos, para quien sabe leerlos en profundidad, encierran un mensaje, que remite a Dios. Leer a Dios en las cosas más pequeñas o extraordinarias, y alabarlo. Y por último, con la voluntad, amamos a Dios y al prójimo en Él. Decir amén es decirle sí a Dios; como María: «Sí», dijo, o «amén», o «así es», o «hágase en mí según tu palabra». Es hacer que el amor se centre en Dios como punto de partida para, desde Él, amar todas las cosas; salvo el mal, o la fealdad pavorosa del mal. El mal es extrañamente feo, porque es iconoclasta, devastador, vandálico. Decir «amén», Diario, es decir a Dios: «Sí, te amo, toma mi vida y haz con ella maravillas, lléname de ti» (10:26:11).

sábado, 7 de enero de 2023

7 de enero de 2023. Sábado.
PARTIDA DE SALTEADORES

Todas iguales para el sol, en Las Palmas, Gran Cnaria. 

-Como una mancha de oro, se va extendiendo el sol con su luz y su galanura, regalando vida y color a las cosas; es decir, haciendo justicia. El sol trata a todos por igual, si no da calor tapado por las nubes, siempre alumbra: hace el día; día que todos viven. Decía San Agustín: «Sin justicia, ¿qué son los reinos sino una partida de salteadores?» La justicia equilibra y da seguridad, es equitativa e iguala, y no es acorde, pues la unanimidad nos empobrece, material y espiritualmente. La justicia lo es si respeta la verdad y da a cada cual lo que corresponde. La arbitrariedad y la opresión no caben en la justicia. La arbitrariedad señala y distingue, sin importarle la imparcialidad. La justicia no es un bien personal, no es de nadie, es de la toda sociedad. Y si alguien se apodera de ella, la envilece y se hace salteador de caminos. Ningún gobernante está por encima de la justica, es la justica la que está por encima de todo. Decía Confucio: «Mejor que el hombre que sabe lo que es justo es el hombre que ama lo justo». Yo, Diario, le diría a nuestro presidente: «Sánchez, la justicia no eres tú, y si la ley es justa, ella es la justicia». Y Ratzinger: «No debe imponerse la ley del más fuerte, sino la fuerza de la ley» (17:18:53).

viernes, 6 de enero de 2023

6 de enero de 2023. Viernes.
OLOR A SANTIDAD

La santidad ilumina, siempre. F: El Rescate.

-Como el sol, la liturgia ennoblece lo que toca, lo ilumina. Un cuerpo echado en un ataúd, no me asusta, me llena de esperanza; pienso: resucitará. Aquí se une, con la esperanza, la fe. Ayer estuve, a través de televisión, en el funeral por Benedicto XVI, y hubo un momento en el que me pudo la emoción. Frente al teólogo que llaman buscador de la verdad, me dije: «¡Ya la habrá encontrado!», y miré al cielo, y el cielo, radiante de luz, me devolvió, en otra mirada amiga, su claridad. Si lo miras en silencio y atención, el cielo siempre devuelve la mirada, irradiando luz. El Dios oculto de Pascal, se manifiesta en el día a día de la vida de los santos. Los santos son la epifanía diaria de Dios, su manifestación más real y palpable, lo que llamamos «olor de santidad». Huele a santidad quien va dejando un rastro de virtud en su palabra y en sus obras a cada paso que da, como los Magos de Oriente, que fueron a Belén a adorar al Rey de los judíos, recién nacido. Dijo Ratzinger sobre los Magos de Oriente en la Epifanía de 2013: «Su peregrinación exterior era expresión de su estar interiormente en camino». Esta ha sido la trayectoria de Benedicto XVI a lo largo de su vida: una peregrinación en la que ha ido dejando el suave olor de lo que ocurría en su interior: la fragancia de su fe y el aroma de su esperanza, con el dulce bálsamo de su humildad: Dios, Diario, ensalzando el polvo (12:33:59).. 

miércoles, 4 de enero de 2023

4 de enero de 2023. Miércoles.
DIOS EN SU BELLEZA

Vivir en la belleza. Iglesia de los obreros. Varsovia. Polonia.

-Es hermoso vivir en la belleza. No solo en la belleza de la rosa o la del ser humano, bellezas frágiles, que se extinguen. La rosa se amustia y el ser humano envejece; es decir: esa vida, que es sueño, se agota, como diría Calderón. La rosa, perfectísima, es, sin embargo, belleza lírica, bucólica, belleza de un instante. A esa belleza yo la puedo amar solo un momento, y, en el recuerdo, amarla para siempre. Pero hay otra belleza que alumbra sin desfallecer: la belleza de la música, la vitalidad del pentagrama que, en silencio, esconde sonidos, melodías, que vislumbran eternidad, jardines celestes sonorizados, retales divinos. «Cristo, música de Dios», escribe Pilar Márquez, mezzosoprano, en su libro Dios es música. Dios poema y armonía supremas en la música de Bach, Beethoven, Mozart., y en tantos otros que escribieron y desarrollaron melodías para guardar en el corazón. «Dios que se prodiga en infinitos matices de belleza. Dios en su belleza. Dios que engendra la Belleza en su Hijo, y que nos redime por ella», escribe Guillermo Utbizu, comentando el libro de Pilar Márquez. Dios de lo mínimo y lo extraordinario, de la gota de agua y del universo, del amén y del salmo, del instrumento musical y del hilo de agua que suena en el bosque. Dios, que ama y se da con el desinterés de la belleza, como el piar del pájaro o la brisa que mueve las hojas del árbol. Dios, Diario, infinito (17:44:02).



martes, 3 de enero de 2023

 3 de enero de 2023. Martes.
ELOGIOS

Verás los cielos abiertos: San Esteban. Hch. 

-El sol amanece con temblor de duda en el horizonte, le cuesta salir y dar luz, calentar. Es invierno y su vestimenta es el gris. Tiempo, pues, de frío, nieve, espasmos, torbellinos, carámbanos, mas aquí en Murcia, sol de vidrio, que se puede quebrar. Leer la prensa estos días, salvo excepciones que deprimen, es alentador: pone alas en los ojos y en los sueños, se hace elogio y teología en la calle: habla bien de Benedicto XVI. Eduardo Verástegui, actor, productor y provida mexicano, dijo de él: «Un papa inteligente, gran teólogo y filósofo, maestro, profesor, amante de la música, lleno de amor por todos. Dijo: “Jesús es la medida del verdadero humanismo». Alfonso Ussía lo califica como «el Santo Padre de la Fe, la cultura, la inteligencia y la bondad». Federico Jiménez Losantos, dice: «Con Ratzinger desaparece el último gran Papa, de nuestro tiempo y de todos los tiempos…Sería un milagro muy de agradecer que existiera el cielo y, desde allí, rezase por nosotros». Pedro García Cuartango: «Ratzinger, un pensador original, un defensor de la tolerancia». José Manuel de Prada: «El papa Benedicto XVI fue percibido por muchos católicos –entre los que me cuento– como un regalo precioso». Bieito Rubido: «Benedicto planteó al hombre moderno un reto gigante: ser católico, que en el mundo moderno es muy difícil. Lo hizo desde su mayor aportación: la combinación de Fe y razón». Y Juan Carlos Girauta. «Noventa y cinco años: primero estudio, luego luz cegadora, luego alarma y silencio». Por una vez, Diario, y gracias a Dios, casi toda la prensa ha estado a la altura al calificar y honrar a un hombre de Dios; que el Cielo los bendiga (17:32:23).

lunes, 2 de enero de 2023

2 de enero de 2023. Lunes.
BELLOS HALLAZGOS

Soñando ser fruto, en el jardín. Torre de la Horadada. Alicante.

-Un nuevo año es la ocasión para que la boca se llene de luces y se desparramen por donde pasamos. «Feliz año nuevo», decimos, y la felicidad que damos al otro, echa raíces en nosotros. Si soy feliz cuando digo: «Sed felices», esa felicidad que doy me llenará el corazón de bellas expectativas, acelerando sus latidos. Todo año que empieza está poblado de sueños, a pesar de que sabemos que muchos de esos sueños quedarán mustios y quebrados, y que solo unos pocos arraigarán y se cumplirán, serán realidad. Me gusta estrenar año porque nos da la ocasión de soñar y de saltar por esos sueños como cervatillos retozando por campos de margaritas. Es una nueva oportunidad, un nuevo cielo que se nos abre, quizá una nueva utopía por la que laborar. Qué hermoso es pactar en campos de sueños, es vivir como decía Albert Einstein: «Aprende de ayer, vive para hoy, espera para mañana». Esperar, Diario, es el adviento, los sueños, que Dios nos regala al nacer, para que podamos realizar cosas hermosas. Tú ejecuta alguno de tus sueños, que otros irán realizando otros, hasta llenar el mundo de bellos hallazgos (12:15:12).
 

sábado, 31 de diciembre de 2022

31 de diciembre de 2022. Sábado.
BENEDICTO XVI

Comienzo de su calvario, Benedito XVI. Roma. F: Prensa

-Muere el Papa Benedicto XVI, descanse en paz. El descanso en Dios, siempre es paz. Paz alumbrada por la hoguera de la esperanza y el destello del amor, con la fe como base que sostiene la columna de todo lo que es seguro. El Papa Benedicto, se ha dormido en el Señor. Aquí ha dejado su sabiduría, su prudencia, su sencillez, con su cruz. Ha sido llamado el Papa de la esperanza: «En esperanza fuimos salvados», dice. Muere una gran luz, en la fiesta de la luz, la octava de Navidad. Fin de año y fin de la Navidad. Muere el año con sus grietas y derribos, con sus penurias y sus limitaciones. Sólo nos queda la esperanza de un nuevo año, con alguien más al que dirigirnos en nuestras súplicas. Leo en la prensa: «Es evocador fijarse en las particularidades de los tres últimos pontificados: Fe, Esperanza y Caridad». Evocador y reconfortante: tres Papas, cada uno con la virtud que le distingue y le define, o el evangelio con el que se daban. Y al final de la vida, Diario, los tres con la luz que les significa: Juan Pablo II, la fe; Benedicto XVI, la esperanza; Francisco, la caridad. Ahí tenemos el triángulo evangélico en el que puede vislumbrarse la salvación de este mundo, como un pequeño adelanto de la bienaventuranza que espera a los limpios de corazón (18:30:03).

viernes, 30 de diciembre de 2022

30 de diciembre de 2022. Viernes.
MI PEQUEÑO BELÉN
(Para Candela, con 12 años ya, metida toda ella en la vorágine del tiempo).

Mi pequeño Belén de luz y ternura. Casa Sacerdotal. Murcia, F: FotVi

-Finaliza el año, y el tiempo de Navidad. De pronto, he oído un rumor de villancicos. Venía de mi pequeño Belén de madera y terracota. De madera, la cueva, en forma de estrella, que acoge a otra estrella dorada, brillante en la noche; de terracota, María y José, y el Niño, apenas unos ojos y una carita de paz y confianza que dormita en el pesebre. Las figuras son regordetas y entrañables; figuras sencillas, que denotan paz y ternura. Y es tan pequeño mi belén que cabe en mi mano. Oído el rumor de villancicos, y con la mano en la boca para que no me delatara el aliento, me he puesto al acecho. Y he contemplado un milagro más de la Navidad. En derredor del pequeño Belén, en semicírculo, cantan Agatha Christie, T. S. Eliot, Luis Cernuda, Vladimir Nabokov, Fiodor Dostoievsky, Anton Chejov, Luigi Pirandello, F. Scott Fitzgerald, y otros escritores, con Charles Dickens a la cabeza, todos con sus cuentos de Navidad en la mano, cantando y ofreciéndolos al Niño-Dios, que, humano y Dios, gime en el Portal. Visto lo cual, Diario, yo, al igual que ellos, también le ofrezco al Niño mi cuento de Navidad: éste que ahora escribo y firmo, asombrado por el amor que refleja y comunica mi gozoso, humilde y pequeño Belén (12:42:47).

jueves, 29 de diciembre de 2022

29 de diciembre de 2022. Jueves.
LA OCASIÓN

El mar y la luz: oro espiritual. Mar Menor. Lo Pagán. Murcia. F: FotVi

-El veintitrés de este mes, desperté y me dije: «Soy feliz: no me ha tocado la lotería». ¿Qué hubiera sido de mí, si, acostumbrado durante tantos años a lo que soy, de pronto me encuentro rico, vestido de Bill Gates y con Microsoft a cuestas, y sin poema (solo euros) que echarme a la boca? Porque no hay poema que resista una lluvia de euros. Así como el terrón de azúcar se diluye en cualquier líquido, de igual modo el poema (la vida) se diluye en la riqueza. ¿Qué vida, por primaria que sea, puede respirar solo euros y no oxígeno, aunque sea éste poético? Ya decía Jules Renard, escritor francés, que lo que distingue a un hombre de un animal, son las preocupaciones financieras. Y Voltaire: «Quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por dinero.» Que se lo digan si no a los corruptos. Respirar euros, debe ser incomodísimo. Sólo creo en el dinero que ayuda a remediar pobrezas; el otro, el sobrante, es dinero que sirve, en todo caso, para quitar el sueño. El avaro es el pobre que, contando monedas, cree vivir en la opulencia. Dios no juega al ajedrez, ni a la lotería, ni a los dados. Dios es amor, y, como tal, solo juega a darse: todo Él es amor, dádiva. El amor encerrado en sí mismo, no es tal, es interés, egoísmo. Lo dicho, soy feliz, porque no me ha tocado la lotería. Entre otras cosas, Diario, porque, como tú sabes, nunca juego a la lotería. Quien evita la ocasión… ¡Ah! (11:09:54).

miércoles, 28 de diciembre de 2022

28 de diciembre de 2022. Miércoles.
OXIDARSE

La bella fragilidad, en el jardín. F: Prensa

-Si Dios quiere, hoy no voy a escribir. Y como creo que quiere, lo dejo en este momento, sin más. Y no por ser holgazán, que no lo soy; sino por buscar poder serlo, alguna vez. Es decir, en este caso, sigo el aforismo de Samuel Johnson, autor del primer diccionario inglés: «Todo hombre –nada dice de la mujer– es o confía en llegar a ser un holgazán». Aunque Walter Scott advierta: «Descansar demasiado es oxidarse». Pero no importa, Diario; hoy, y si Dios quiere –que creo que quiere–, dejo de escribir ya: me oxidaré un poco  (12:03:15).

martes, 27 de diciembre de 2022

27 de diciembre de 2022. Martes.
BELLÍSIMO ACORDE

Bello poema vegetal en el jardín.Torre de la Horadada. 

-Cuando hay armonía, sucede el acorde, la uniformidad de la orquesta. Y ayer tarde sonó un bellísimo acorde en el concierto que en sí es la poesía, o ese asombro espiritual que causa todo lo que alienta, sea la brizna que gozosa porta la hormiga o el mar sacudido por vientos y mareas, desbocado. Como en Navidad todo es posible, sucedió en la avenida Alfonso X el Sabio, en el Museo Arqueológico. Nos reunimos unas quince personas, la mayoría poetas, para hablar de nuestras cosas; es decir, para ensalzar la palabra como la forjadora y caudal armonioso de la poesía. La palabra, que es espíritu, nace del otro espíritu, soplo, que es la palabra. Decía Juan Ramón Jiménez que la poesía es el intento de aproximación a lo absoluto por medio de los símbolos. La poesía siempre es intento, tentativa de dar y tocar, de vivir místicamente en la trascendencia. Es decir, al tiempo de estar en el mundo, el fin y el ser de la poesía es respirar trascendencia, envolverse en la infinitud de la divinidad. La poesía no está hecha solo de palabras, también debe haber pasión, emoción, de lo contrario queda limitada su estructura, dañada su misma existencia. Allí estábamos Eloy Sánchez, Dionisia García, Andrés María García, Luis Escavy, Lola Tórtola, Vicente García, el profesor Francisco Javier Díez, el director de la colección Adonais, Carmelo Guillén, y otras personas, Diario, que escuchaban y se gozaban con el rumor sutil de lo entrañablemente poético (17:49:37).

lunes, 26 de diciembre de 2022

26 de diciembre de 2022. Lunes.
SUEÑOS TERRIBLES

Una mano sin final, causando miedo. Torre de la Horadada, 

-Anoche tuve un sueño terrible. Los sueños de miedo son tan terribles, porque sueñas sin saber el final terrible del sueño. ¿Y si llegado al final del sueño, cae la cuchilla de la guillotina y te rebana el cuello? Qué panorama tan sombrío debe ser contemplar, a unos palmos de distancia, tu cuerpo sin cabeza. Tu cabeza aquí mirando, y el cuerpo, un poco más allá, regurgitando sangre. Decía Umbral que madrugar era espiarse uno a sí mismo. Espiarte a ti mismo hecho un dolor de cabeza. Todo esto es terrible, pero no hasta el extremo de (como me ocurrió a mí con el sueño de anoche) dejarte sin aliento. En este sueño mío no había vampiros, ni guillotinas, ni sangre, ni Allan Poe tratando de asustarme con una de sus pavorosas historias. El sueño consistía en que el lenguaje –la Lengua, el Idioma– perdía las letras A, mayúscula, y la a, minúscula. Algo o alguien las iba borrando de todas las palabras, y, aunque podía gritar «¡socorro!», no podía pedir «¡auxilio!», ni decir «¡madre, dónde estás!», ni mar, ni rosa, ni tantas otras cosas hermosas y tan cercanas. ¡No poder decir palabra, ni abecedario, ni vocabulario, ni ala…! ¡Ni «Diario»! Terrible. Sí podía decir «leo un cuento», o «tengo miedo», o «¡Dios!» Y esto me salvó. Grité: «¡Dios!», con todas mis fuerzas, y el grito me hizo despertar. Y, despierto, corrí a la biblioteca y allí estaban (¡ah!, suspiré) Virgilio y su Eneida, Dios y su Biblia y El Cuervo, de Allan Poe; todos los libros con todas sus letras y sus historias admirables, y también Navidad, y María, y ternura, la otra gran historia… Todos.  Bueno, decirte, Diario –es confidencial–, que ya puedo leer el poema El Cuervo sin que me cause miedo: sé el final y sabido el final, como decía Borges, sabes todo el cuento… (12:28:45).

sábado, 24 de diciembre de 2022

 

24 de diciembre de 2022. Sábado.
FELIZ NAVIDAD
-En el Nacimiento de Dios, todos nacemos un poco, todos somos Jesús en el portal de Belén. Jesús nace y se nos da paz, luz, cántico, ternura, armonía, gorjeo de niño, plenitud. María se da madre y José, padre; y los tres, Jesús, María y José se nos dan familia entrañable, sagrada, que nos invitan a caminar, y a sentir con ellos. Pidamos al Niño Dios que traiga la paz al mundo, que olvide los aleluyas del cielo y oiga el ruido del mundo, que acabe con los egoísmos y ponga los corazones del hombre en disposición de amar, y de darse, y de plantar un mundo mejor, con ángeles en cada esquina de nuestra humildad; ángeles que nos lleven por caminos de bondad, de verdad, de justicia. Y aquí os doy mi villancico de este año, para que os haga felices, si así os parece.


Feliz Navidad, Diario, y déjate bendecir por el Niño Dios, que nace y se acerca a ti, y te ofrece su amistad; déjalo estar, que es un Niño que pide amor, copia son sonrisa y ríe, y ámalo en cualquier ser necesitado (11:54:24).


viernes, 23 de diciembre de 2022

23 de diciembre de 2022. Viernes.
LA LLANEZA DE LA LLUVIA

María, esperando el rocío, que le viene del cielo. Casa Sacerdotal. Murcia 

-Se apresura el adviento hacia su final, y la espera se hace impaciencia, ansiedad. Es como si el adviento, al igual que la madre primeriza que va a dar a luz, se metiera en nerviosismos. Isaías pone la nota líricamente, frenética. «¡Cielos, destilad el rocío!», exclama. En la noche, el cielo destila (o derrama gota a gota) el agua que alivia la sed de la tierra y de las cosas. En la noche de la historia, con el fin de que alivie la sequía de Dios que se percibe en el ambiente, el profeta pide que los cielos irrumpan en la tierra como rocío. Rocío de la mañana, que aparece en las plantas como un cielo estrellado. Es como si la mañana, sedienta, bebiera estrellas para calmar así su sed. Isaías, en su petición, adivinaba al Mesías, al Salvador: el Cristo, el Ungido del Señor. Y le urge para que se dé prisa. El mundo (como Israel entonces) está muy mal, y el profeta, el orante, el que habla de Dios y con Dios, le pide a este Dios que se apresure y envíe al que es agua que calma toda sed, aun la de la indiferencia. Agua, pero en forma de rocío; para que humedezca sin arrasar, sin destruir. Nacido de la noche, el rocío, desde la humildad, desde la sencillez, casi desde la reverencia, calma la sed. El rocío es la llaneza de la lluvia. Como el Señor que nace, Diario, en el Portal de Belén: él riega sin ofender (17:34:24).

jueves, 22 de diciembre de 2022

22 de diciembre de 2022. Jueves.
MUDEZ

Silencio de la rosa en el jardín. Casa Sacerdotal. Murcia.

-Visto que había perdido todas las palabras, quedó en silencio, y entonces supo que era sabio, cuando no tuvo nada que decir y sí que buscar, escuchar y asombrarse. Se llenaba los ojos del sentir y la belleza de las cosas y luego exclamaba: «¡Oh!», y, en la exclamación, admiraba y celebraba al Creador. Y es que en la redondez de la O, el sabio encontraba la infinitud, donde se mueve la divinidad. El sabio calla más de lo que dice, por eso, cuando llega el momento, dice cosas sabias. Como aquel sabio callado y siempre en expectación, que, por señas, decía a sus discípulos: «En boca cerrada no entran moscas»; en lo que todos los sabios estuvieron y siguen estando totalmente de acuerdo. Este sabio se adelantó a Borges, que dijo: «No hables a menos que puedas mejorar el silencio». O el sabio Jenócrates, filósofo griego, discípulo de Platón, que afirmó: «A menudo he lamentado mi discurso, nunca mi silencio». Mientas no los hagas sandez con tus palabras, tus silencios son sabiduría, vuelo, ensoñación. Subido al tren del silencio, Diario, no oigo más que el piar de los pájaros y los otros hermosos silencios del pasajero que se sienta a mi lado: del que solo se intuyen las palabras que, en silencio, lee con fruición y una sonrisa en los labios: es feliz (11:58:38).

miércoles, 21 de diciembre de 2022

21 de diciembre de 2022. Miércoles.
LA VIRGEN ESTÁ ENCINTA

La pureza la distingue. Jatdín. Casa Sacerdotal. Murcia

«Mirad, la virgen está encinta y dará a luz un hijo», anuncia Isaías, el profeta. A Dios no le cuesta empequeñecerse hasta caber en el seno de María. Dios, Espíritu, se aminora amor humano, y cabe así en la oquedad preciosa del seno de la mujer. Se aminora, ahora, amor, para ser luego Amor total, eterno. « ¿Por qué tardas?», insiste San Bernardo. «Cree, di que sí, y recibe». Y María dice su Sí, se da, y recibe la concepción de Dios, que es otra donación, otro Sí. Sí, por Sí. Y en esas estamos: aguardando a que el vientre de María se abra y dé a luz un Hijo y le ponga por nombre Emmanuel, para poder clamar entonces: «¡Dios-con-nosotros!», en la noche, la noche de la fe, con ángeles y pastores. Y como dice el salmo: Dios habrá venido a visitar su viña, «la cepa que su diestra plantó»; y en María, mujer terrenal, madre virgen que inaugura un tiempo nuevo, celeste: la viña, es decir, la Tierra, la que Dios visita “Dios-con-nosotros” en el seno de María, y que lo da a luz Hijo y le pone por nombre Jesús, el que salva. Y entonces se podrá decir de María, como con el gozo de un grano de uva que se rompe en la boca, lo de: «¡Dichosa tú que has creído!»; has creído y provocas de este modo una conjunción de amor entre el cielo y la tierra, infinitos, siderales, y del que aún, Diario, gozosamente, nos nutrimos ¡Ah, la Navidad! (12:25:05).

martes, 20 de diciembre de 2022

20 de diciembre de 2022. Martes.
MORAL

Seguir un orden, y vivir. Salinas San Pedro del  Pinatar. Murcia

-Pues va Ortega y Gasset y en el año 28 del siglo pasado –ya ha llovido desde entonces– se le ocurre decir: «Europa se ha quedado sin moral». Entonces. Pero es que si viviera, estoy seguro que seguiría diciendo lo mismo, sólo que con más dolor metafísico o existencial, íntimo; con más dolor de su alma de intelectual visionario y libre. Luego Ortega añadirá que la moral «es siempre por esencia, sentimiento de sumisión a algo, conciencia de servicio y obligación». O sea, que la moral es norma (pauta, canon), que regula conductas y sentimientos contra la arbitrariedad y el probable desafuero del injusto; sin moral, no habría convivencia posible. La moral es ese don dado al ser humano, que apoyado en la ley natural (ley de Dios que se percibe y late en las cosas) por el que puede darse leyes a sí mismo, para una coexistencia amable y racional, creativa, de largo, fecundo y pacífico recorrido. Y añadía Ortega: «Con la moral corregimos los errores de nuestros instintos, y con el amor los errores de nuestra moral», que, a veces, serían irreversibles y trágicos sin amor. El amor, Diario, es la llave que abre todas las puertas, aun las celestiales (11:57:44).

lunes, 19 de diciembre de 2022

19 de diciembre de 2022. Lunes.
UN SÍ, POR OTRO SÍ

No es Navidad, pero lo parece.  Casa Sacerdotal. Murcia.

-Todavía no es Navidad y ya se me empiezan a poner las palabras de Navidad, festivas, con estructura de buena noticia, de evangelio. Si veis que mi boca echa villancicos como lirios del campo, aunque estemos en duelos de estructuras y valores, no me la tapéis, le puede la alegría. Si tiro de las palabras, como de las hilachas de un chicle en la boca, me salen palabras felices, y aun líricas, y no negros presagios o palabras con filo de navaja, cortantes. Me apoyo en San Bernardo, que habla de la palabra que ha de decir María –el Sí, sin condición– para recibir  “al Sí que es la Palabra”, que se da también sin condición: dar una palabra menor, aunque total, para recibir al que es la Palabra mayor, esencial. Con el Sí, María desocupa el yo (su yo) y se abre al amor, para poder así recibir al Tú, que es Cristo. Sin desalojo, no hay novedosa ocupación. San Bernardo (retóricamente) insta, urge a María a que responda el Sí –dé su palabra– al Ángel, para concebir la otra Palabra, la divina, que es otro Sí de Dios a la humanidad. Sí de María y Sí de Dios. Sin uno, no es posible el otro. Dios no cabe en el egoísmo, es decir, en el amor de uno, sino en el amor de dos, o amor donado. Dios nunca es concebido en el “yo”, sino en el “tú”. «Emite tú una palabra fugaz y acoge en tu seno a la Palabra eterna», apremia San Bernardo a María. Deja escapar el yo –viene a decirle, Diario– y hazte con el tú de Dios, que cabe en tu seno» (12:11:48).

sábado, 17 de diciembre de 2022

17 de diciembre de 2022. Sábado.
ILUMINANDO LA NAVIDAD

Foto de recuerdo y agradecimiento, en Casa Sacerdotal. Murcia.

-Abre el día soleado y festivo, casi tocando la Navidad. «Cielos dejad caer el rocío, que las nubes lluevan al Justo, y la tierra germine al Salvador», dice el salmo con voz de profecía. ¡Tan cerca ya!  Un rayo de sol entra en mi taza de café; digo: «Me beberé el rayo de sol y dejaré el café». Lo intento; pero, con sorpresa, veo que sorbo el café y queda el rayo de sol, dando luz a la taza. Digo: «Amén», y continuo en lo mío: escribiendo. Cuando escribo o leo es el  momento en el que me siento joven y apenas noto mi vejez: es el milagro de la ensoñación. La Casa Sacerdotal se ha convertido en un bello parpadeo y adorno de luz y estrellas en los pasillos y en la capilla. ¡Todo es luz! Hace unos días los residentes y el personal de servicio nos hicimos en la capilla una foto de recuerdo y, por nuestra parte, de agradecimiento a estas personas, que, en silencio, tanto hacen por nosotros. Con sus vestimentas y sus blancas sonrisas nos alegran el día y las comidas, y nos invitan a seguir viviendo: son el milagro de nuestra vejez. Los servidores de la Casa se mueven como relámpagos y nosotros, los más ancianos, como barcas con remos. En la foto, todos estamos de pie y algunos con sonrisa; sin embargo, en el corazón, todos estamos alegres, aunque, a veces, nos duela el mundo. Presiden el momento, Jesús en el sagrario, María con el Niño y el Recién Nacido en el altar, y nuestras vidas en el Sí de cada día, Diario, aleteando, vociferando paz entre silencios, siendo una pequeña luz encendida, aún, de Navidad (12:12:54). 

viernes, 16 de diciembre de 2022

16 de diciembre de 2022. Viernes.
LO GRANDE Y LO PEQUEÑO

También está en las palomas, como en el mar. Dubrovnik. Croacia. 

-Ayer de madrugada lloviznó: quizá llorara el tiempo. El otoño, antes de dar paso al invierno, ha herido con dureza otros lugares. Se está despidiendo con saña y lo hace entre risas de agua y viento, con grandes aspavientos. Inunda calles y casas, a lo grande. Ayer hablaba de las cosas sencillas y se me olvidó hablar del sitio de Dios en estas cosas. No de Dios junto a la fregona o el pájaro o la papelera, sino de Dios en la fregona, en el pájaro, en la papelera. Dios no es fregona, ni pájaro, ni papelera; pero está en esas cosas. «Loado sea mi Señor –diría el de Asís–, por todas las cosas sencillas. Porque en ellas veo a Dios, y, en todo caso, lo sospecho»; es decir: en el gorrión que alimenta a sus crías y en el alimento que les da. «Te notas más en mis latidos, es verdad», diría el santo, «pero también en la luna y en el charco donde ella se refleja o del que se nutre como poesía de la noche». Y en el dolor, estás en todo dolor; pues, desde la cruz, diría, estás en cualquier dolor del mundo. Por eso San Francisco se viste de pobreza, de harapos y sandalias, para estar más cerca de la humildad de la cruz, su humillación más extrema. La pobreza de San Francisco es su cruz.  Menor, en todo caso, que la cruz de Cristo, donde el dolor del mundo es más dolor, porque es dolor divino, y en el que, además, converge todo el dolor humano. Y, si Dios halla casa, acomodo, en el dolor, ¿por qué no en la fregona, y en el pájaro, y en la papelera, y en el papel de envoltorio que cae en la papelera: siendo así que el dolor es más terrible y bajo, más turbador y grosero, que cualquier otra cosa en el mundo? Dios está hasta en el silencio, por el que a veces, Diario, se le oye pasar como suave brisa, según lo viera Elías (17:29:54).