25 de junio de 2021. Viernes.
EUTANASIA
EUTANASIA
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| No es sangre, es vino, de Israel. F: FotVi |
-Hoy tocaba analítica y me he dejado hacer, sin balar, como un cordero
llevado al matadero. Menos mal que las manos del enfermero –Pedro– son manos de
ángel que hurgan, pinchan, y extraen la sangre. Sin dolor y con una sonrisa
pasada de los ojos a las manos –no hay boca: hay mascarilla–, y de éstas, a la
aguja de extraer. Un hilo de vida se me ha ido en la jeringuilla.
Consideración: «¡Qué frágil y qué bella es la vida!» Y qué mal la tratan
ciertos poderes públicos. Leo: «La ley de eutanasia que hoy entra en vigor es
un fracaso de la sociedad y un fraude del poder público». (Sánchez y los suyos todo
lo que tocan lo quiebran; y, en todo caso, sus actuaciones son un quebradero de cabeza). Fracaso de la
sociedad: no sabe o no le interesa –el coste es alto– paliar el dolor. Lo
sencillo y afrentoso, y luctuoso, entonces, es matar. Está claro que a cierta
progresía no le interesa la vida, le va más la muerte. ¿O no? «Por sus frutos
los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?»,
sentenció Jesús. Como diría el Papa Francisco, es la consecuencia de la
«cultura del descarte». Lo que no vale se hace, no humanidad, no misericordia,
se hace chatarra y se tira. Desecho, despojo de cementerio, una moneda falsa,
sin valor, lanzada al río, Diario, para que se pierda y no moleste en el
bolsillo, total... (13:13:31).
Soy la señora que habló contigo anoche en la presentación de tu último libro en el MUDEM. Me gusta tu poesía, Vicente, y muchas cosas de las que leo por aquí en este blog. Pero, permíteme que te diga que me rechinan en ti algunas palabras que les diriges a Sánchez, especialmente en esta entrada de la eutanasia. Tú, que admiras las palabras y las cuidas tanto, no las deberías utilizar engañosamente. Con la eutanasia nadie mata a nadie, solo se respeta la voluntad del que no desea más vivir; sus razones tendrá para ello y yo no soy quién para hacerle vivir una vida que él/ella no considera ya digna. Esta ley permite que se respete su voluntad, aunque en el sistema de cuidados previos hagan falta muchos cambios para mejorar la vida de las personas cuando más lo necesitan. Un saludo, Vicente, espero no haberte molestado con mi comentario y que tengas buen verano.
ResponderEliminarSí, te recuerdo, gracias. Tú dices lo que piensas, con paz y respeto, Mari Sol, y yo digo lo que pienso. También, creo, con paz y respeto. Yo lo que he querido decir es que con la eutanasia se inicia un camino peligroso, porque, habrá ocasiones, en las que, en vez de cuidar y poner amor en la atención del enfermo, se fuerce al enfermo a que diga que desea morir, o que, como está ocurriendo en los pocos países que está legalizada la eutanasia, sin preguntárselo, decidan que no está bien que alguien sufra más, y acaben por matarlo. Eso es lo que temo. Yo miro más por la vida que por la muerte. Y de Sánchez, no sé a ti, pero a mí me ha decepcionado: lo que dijo ayer, no lo recuerda hoy, y mañana dice lo contrario. ¿Y por qué hace una ley tan trascendente como ésta sin consultar con nadie? ¿Y en tiempo de pandemia? Perdona, Mari Sol, pero Sánchez me horroriza. Por sus bandazos. Por sus falsedades. Respeto lo que has escrito, jamás me puede molestar un modo tan elegante y afable como me has expuesto tu modo de pensar, y sentir, yo también te deseo un excelente veraneo. Mari Sol, no me molestas. Gracias.
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