28 de enero de 2017. Sábado.
SIN PRISA
Viviendo el sol, en el jardín. Torre de la Horadada. F: FotVi |
-Hoy, día soleado, me paro a pensar que cuando sale el
sol lo hace para todos. Hermoso espectáculo el del sol alimentando de luz tanto
a la gran montaña como a la pequeña y laboriosa hormiga, a la rosa como al
espino que la defiende. Nadie se lamenta del trozo que le toca, pues lo colma
todo. El sol es alegría, como lo es la lumbre o la vela, o la humilde presencia
de la luciérnaga en la noche plena. Cuando crujen y acechan las cosas. La luz
solo enfurece a los que son topos de la noche, sanguijuelas de la tierra. O
cuando deslumbra, dañando la visión, y la conciencia, a veces. Como el hongo
atómico, o un bosque en llamas. Porque, entonces, es incertidumbre, peligro, aviso
de muerte. Nunca una cerilla encendida en la oscuridad causará temor, y más si
andas perdido en la estrechez inmensa del bosque. Hoy celebro la novedad del
sol; como dejó dicho Heráclito de Éfeso, el sol nuevo de cada día. Hoy, Diario,
me dejo cubrir de sol, paseando contra la prisa (19:37:09).