sábado, 2 de agosto de 2014


2 de agosto de 2014. Sábado.
PARTICIÓN
 
Compartiendo espacio, en Las Canteras. Las Palmas
 
-Multiplicar cinco panes y dos peces, ya se hizo una vez, y, si se hizo una, se pueden hacer mil. Sólo basta con que el que posee los cinco panes y los dos peces, tenga voluntad primero de partirlos y luego de repartirlos, que es otra partición, pero más hermosa. El partir se hace con las manos, el repartir, con el corazón. Sin manos ni corazón, es muy difícil (imposible, diría yo) hacer llegar cinco panes a una multitud hambrienta. En aquella ocasión, y como dicen las Crónicas Evangélicas, «comieron todos hasta quedar satisfechos», como en la mesa del pobre, donde lo poco o lo apenas suficiente siempre llega y satisface. El exceso, harta; lo justo, deleita. El empacho lleva a la resaca, y al vómito; lo parco, compartido, al gozo. Comprobarlo, Diario, es entrar en el reino de la sabiduría y de la solidaridad (19:18:46)

2 comentarios:

  1. Los corazones generosos reviven el milagro de la multiplicación de los panes y los peces, uno de los hechos extraordinarios del Gran Taumaturgo. Partir y repartir para compartir proporciona más satisfacción que acumular y encerrar bajo cuatro llaves lo que la vida nos ha dado.

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  2. Si hubiera más partir y repartir, sería menos la miseria material (y espiritual) en el mundo. Cuando hay compasión y deseos de justicia, puede haber multiplicación.

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