21 de mayo de 2019. Martes.
EL CIRCO DE LOS
TRILEROS
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Pensamiento profundo, de El Roto, en El País. |
-Hoy se constituye el circo; es decir, toman
posesión de nuestra voluntad en el Congreso los elegidos por el pueblo, que nunca se equivoca. Según esta máxima: el
pueblo es sabio y circunspecto, humilde y laborioso, avispado y sagaz, y, a la
hora de elegir, opta por los más ricos en virtudes y más desprendidos: elige a
los mejores. Pero, todo esto, al revés, suena mejor. El pueblo es el pueblo, y,
a veces, es sabio y tonto, y circunspecto e imprudente, y humilde y altanero, y
solícito y envidioso, y, en la mayoría de las ocasiones, inexperto para tratar
con trileros que enfervorizan con palabras, y, con palabras, engañan. Como
aquellos predicadores del oeste, que, llenos de güisqui, enardecían a sus
oyentes, y al final, para que pudieran salvar sus almas, les sacaban los cuartos.
El menos malo de los sistemas de gobierno, la democracia, hay ocasiones en que,
o por habilidad del político, o por la candidez de los votantes, el pueblo es
engañado y expoliado, para perversión de la democracia, y para tristeza de los
creyentes en el sistema. Hoy en la constitución del Congreso, hay gentes de
buena fe, sinceros demócratas, y también, gentes sin escrúpulos, advenedizos, y
hasta políticos presos que pretenden arruinar la democracia. Si todo se mezcla
y se agita, sale un coctel amargo, y de difícil catadura, vomitivo. Este circo no
es para niños ni para personas de buena fe; este circo, en vez de risa, produce
asco y tristeza, hasta el punto de que, en el mismo Congreso, ha habido quien ha calificado esta sesión, en
la que se ha constituido la Cámara, de «escarnio» y «bochorno. Por mi parte,
Diario, con llanto -la tarde también se llueve- y pena, digo: «Hasta más ver, democracia», si es que te
vuelvo a ver tal como te soñé, pura y honesta, y agitando alas de libertad, de equidad, y de fraternidad (18:30:34).