28 de octubre de 2019. Lunes.
URTICARIA
Langosta estudiando una encuesta. Lopagán. F: FotVi |
-Casi todas las semanas
las encuestas me dan en los ojos y me los llenan de vacío, un vacío desolador. Sin
pájaros ni ríos, sin cigüeñas en las torres de Castilla, y la pobreza insistiendo
por las calles, que hacen más trágico este vacío. Las encuestas no dan
soluciones al estado de cansancio y corrupción de la sociedad, sino que agravan
un poco más, si cabe, este desaliento y perversión que ensombrece nuestras
vidas. ¿Dónde están los políticos? «Su misión es solucionar problemas y no
causarlos», me digo, y la desesperanza empieza a llenar este vacío. La
desesperanza, el agua fría que inunda nuestros pensamientos, y quita vibración
a nuestros actos. La encuesta es una mentira, que alguna vez –pocas– acierta. Mentira
con números y tantos por cientos, que, cuando llega el momento, o se queda
corta o se pasa. Qué temeridad fiarse de las encuestas. Yo, Diario, no tengo fe
en las encuestas; como si me rozara con una ortiga, me dan urticaria, y risa (18:38:57).