23 de junio de 2020. Martes.
SALTAN PALOMAS
Todo es vida, origen, en el jardín. Torre de la Horadada. F: FotVi |
-Soy de Dios y de la vida. Se me llene la boca, como un bocado de melocotón, cuando digo Dios o Vida, porque los considero a ambos sinónimos. Los considero equivalencia, simetría. Entonces, de mi boca llena de Dios y de Vida, saltan palomas. Y humildes salmos que cantan la existencia: el ser y el amor. Cualquier detalle –una gota de agua, una brizna de paja, un vuelo de pájaro– me emocionan. Y, pensando en Candela –mi sobrina-nieta–, pido una bendición por cada niño que se cruza en mi camino; con cada madre, y a cada anciano. Y me digo a mí mismo: «Dios y la Vida están en ellos». Los unos –los niños–, en el origen, y los demás, en los quehaceres del día a día, que a la vez también son origen y final, pero maravillosos. Contempladas las cosas con curiosidad, con perspectiva de análisis y estudio, con cuidado de arqueólogo, Diario, caes en la cuenta de que todo es creación, que no hay nada que sea inútil o desechable en el mundo, que todo es movimiento que camina hacia su plenitud, hacia una vida que -más allá de cualquier teoría- anhelamos eterna (18:12:15).